<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>La tan esperada Reunión de Alto Nivel (RAN) entre España y Marruecos, la primera en casi ocho años, tendrá lugar los días 1 y 2 de febrero en Rabat y contará con “una decena de ministros” del Gobierno de Pedro Sánchez, según anunció ayer</strong> <strong>el Ministerio de Asuntos Exteriores en una muy escueta nota de prensa y confirmó a los periodistas el propio ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares.</strong></h4> <strong> </strong> <strong>“Se trata de la primera reunión de este tipo desde 2015 y es uno de los grandes hitos de la hoja de ruta acordada con Marruecos el pasado mes de abril”</strong>, declaró ayer José Manuel Albares desde Níger, primera etapa de una gira por África Subsahariana que concluirá hoy en Nigeria y Guinea-Bissau. <strong>La última RAN entre España y Marruecos se celebró en junio de 2015</strong> y la siguiente había sido programada, en principio, para diciembre de 2020, pero desde entonces sufrió varios aplazamientos a causa de la pandemia del COVID-19 y de la profundísima crisis diplomática que estalló en abril de 2021 tras la decisión de España de acoger en un hospital de Logroño al líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, por motivos humanitarios. <strong>El punto de inflexión se produjo en marzo de 2022, con la decisión del Gobierno español de aceptar el plan marroquí de autonomía para el Sáhara Occidental como “la base más seria y realista” para la solución del conflicto. </strong>Como consecuencia de este “deshielo” (una de cuyas consecuencias ha sido la grave crisis diplomática con Argelia, principal suministrador de gas a España), el presidente Pedro Sánchez y el Rey Mohamed VI adoptaron, el 7 de abril en Rabat, una hoja de ruta bilateral que sentó las bases para la recuperación de las relaciones diplomáticas y allanó el camino para la celebración de la Reunión de Alto Nivel. La RAN fue anunciada en un primer momento para noviembre del año pasado, pero finalmente fue fijada para principios de 2023. <h5><strong>Ausencia de Yolanda Díaz</strong></h5> Albares no precisó exactamente qué ministros van a participar en la reunión junto a sus contrapartes marroquíes, aunque se mostró convencido de que “habrá muchos ministros por la calidad de las relaciones con Marruecos”. En todo caso, el jefe de la diplomacia advirtió de que “las delegaciones nunca se componen de todos los ministros” y que la presencia o la ausencia de cada miembro del Gobierno “depende de la agenda”. En cuanto a los asuntos concretos de la cumbre, Albares precisó que “se prevé firmar un buen número de acuerdos”. Fuentes de Exteriores consultadas por <em>The Diplomat</em> no pudieron aportar más detalles, pero se estima que podrían ultimarse alrededor de un centenar de acuerdos bilaterales. Lo cierto es que <strong>la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz</strong>, ya ha anunciado que no participará en el encuentro y todo apunta a que tampoco lo harán la ministra de Derechos Sociales y líder de Podemos, Ione Belarra, ni el titular de Consumo y coordinador federal de IU, Alberto Garzón, los otros dos miembros del socio minoritario de Gobierno, Unidas Podemos. Respecto a este punto, Albares recordó ayer que “la vicepresidenta ha estado en algunas cumbres y otras no”. “Irán los ministros que tengan temas que tratar con sus homólogos. No conozco los temas que tiene el Ministerio de Trabajo en este momento”, agregó. <h5><strong>La nueva etapa</strong></h5> <strong>Desde que se reanudaron las buenas relaciones, Albares (quien llegó al cargo en julio de 2021, con la crisis diplomática </strong><strong>en todo lo alto) ha mantenido hasta ocho encuentros bilaterales con su homólogo de Marruecos, Nasser Bourita</strong>. La última reunión tuvo lugar el pasado 28 de noviembre, cuando el ministro marroquí aprovechó una escala en Madrid para entrevistarse con el español y seguir avanzando, entre otros asuntos, en los detalles de la Reunión de Alto Nivel. Como consecuencia de la aplicación de la hoja de ruta, <strong>Albares y Bourita acordaron el pasado mes de septiembre en Nueva York la reanudación gradual y parcial del paso de mercancías a través de los puestos aduaneros terrestres</strong>, lo que implicará la reapertura de la aduana de Melilla y la apertura de la primera aduana en Ceuta. De momento las aduanas permanecen cerradas, pero los dos Gobiernos han expresado su deseo de abrirlas a principios de este año, a ser posible antes de la celebración de la RAN. Asimismo, en los últimos meses se han reunido los grupos de trabajo sobre varias áreas de interés bilateral, como la delimitación de las aguas territoriales en la fachada atlántica o las cuestiones migratorias. Según el ministro, desde que comenzó la “nueva etapa en las relaciones” las llegadas irregulares de migrantes han descendido en torno a un 25% y el comercio se ha incrementado en un 30%. En cualquier caso, el Gobierno español ha hilado muy fino, en los últimos meses, para evitar cualquier paso atrás en su idilio con Rabat. Un buen ejemplo de ello fue la polémica que estalló a mediados de 2022 sobre la posible implicación de Marruecos en el espionaje a políticos españoles (el caso<em> Pegasus</em>), un asunto que Albares ha intentado eludir en todo momento con el argumento de que “las relaciones internacionales se basan en hechos, no en conjeturas”.