Bala Venkatesh Varma durante el acto./ Foto: Executive Forum
Eduardo González. 21/04/2017
El embajador indio en España, Bala Venkatesh Varma, aseguró ayer que India es uno de los países emergentes con más proyección de futuro del mundo y que las reformas políticas y el nuevo marco legal instaurados por el Gobierno de Narendra Modi ofrecen grandes oportunidades para las empresas extranjeras, incluidas las españolas.
“Las infraestructuras constituyen uno de los sectores con más posibilidades de inversión”, declaró el embajador durante un desayuno informativo organizado por Executive Forum y Abertis en el Hotel Palace de Madrid.
Según el embajador, su país ha salido fortalecido de la crisis financiera internacional y sus perspectivas de crecimiento son muy prometedoras. De hecho, precisó, India podría convertirse a mediados de este siglo en una de las tres grandes potencias económicas globales, junto a Estados Unidos y China, gracias entre otros factores, al crecimiento sostenido de su población, “una de las más jóvenes del mundo”.
En este contexto, prosiguió Venkatesh Varma, las recientes reformas gubernamentales y el nuevo marco legal del país contribuirán a generar interesantes oportunidades de negocio para las empresas extranjeras, sobre todo en sectores claves como las infraestructuras, la energía (“India necesita todas las fuentes de energía), la defensa, el automóvil, la banca y las smart cities.
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Venkatesh Varma asegura que India se perfila como la tercera potencia mundial
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Respecto a este último sector, el embajador expresó el deseo de India de contar con “el saber hacer y la experiencia de las empresas españolas” para ayudar a desarrollar 2.100 smart cities que permitan regenerar las ciudades obsoletas mediante políticas de sostenibilidad.
Venkatesh Varma anunció también el interés de su país en transformar su red ferroviaria, la tercera más importante del mundo y en cuya modernización invertirá 125.000 millones de dólares, y en desarrollar las infraestructuras de conectividad, el sector del automóvil y las telecomunicaciones y el comercio electrónico, unos retos en los que, aseguró, las empresas españolas pueden tener grandes oportunidades.