Representación de la UE en Madrid./ Foto: ec.europa.eu
Eduardo González. 09/05/2016
El Tribunal de Cuentas Europeo (TCE) considera que los edificios que ocupan las oficinas y residencias de los diplomáticos de la UE en todo el mundo “no ofrecen la mejor relación entre coste y prestaciones” y presentan deficiencias en su gestión y selección.
El Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), el órgano encargado desde 2011 de coordinar la política exterior y de seguridad de la UE, proporciona oficinas para 5.300 trabajadores en alrededor de 140 delegaciones, residencias para los jefes de delegación y alojamiento para 2.400 miembros del personal. A tal fin, el Servicio gastó 165 millones de euros en 2014 y en 2015 acordó las condiciones para pedir un préstamo de 200 millones de euros para la adquisición, a largo plazo, de más oficinas.
El informe del TCE sobre la gestión de los edificios del SEAE en todo el mundo, hecho público el 28 de abril, revela que, “si bien algunos edificios satisfacen por lo general las necesidades de las delegaciones, en algunos casos no ofrecen la mejor relación entre coste y prestaciones debido a que su superficie supera los límites impuestos por la política inmobiliaria”.
Asimismo, el SEAE “posee edificios que ha dejado de utilizar” y no siempre se seleccionan los edificios adecuados “debido a insuficiencias en cada una de las principales fases de la selección”. El Servicio Exterior europeo, según los auditores, “carece de conocimientos especializados de gestión inmobiliaria y todavía no ha implantado sistemas eficaces para gestionar sus inmuebles”.
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España comparte delegaciones de la UE en Azerbaiyán, Myanmar, Sudán del Sur y Yemen
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El Tribunal recomienda, entre otras medidas, que el SEAE “introduzca sistemas para gestionar eficazmente los inmuebles en propiedad”, lo que debería incluir “un ajuste más estrecho de la superficie de oficina con el número de efectivos” y la utilización de la superficie sobrante para la «coubicación” con otros Estados miembros o con otras instituciones u organismos de la UE, a fin de «ahorrar gastos”.
De acuerdo con los datos de 2015, sólo diecisiete de las alrededor de 140 delegaciones permiten la coubicación con uno o más Estados miembros. En concreto, España se beneficia de las delegaciones de la UE en Azerbaiyán (que comparte con Croacia), Myanmar, Sudán del Sur (que comparte con Dinamarca, Francia, Alemania, Italia, Países Bajos y Reino Unido) y Yemen.