The Diplomat. 09/05/2016
El Gobierno en funciones de Mariano Rajoy ha apostado fuerte a la hora de colocar a españoles en puestos de alta responsabilidad dentro de la OTAN. Para ello ha presentado las candidaturas del secretario de Estado de Defensa, Pedro Argüelles, y del secretario general de Política de Defensa, el diplomático Alejando Alvargonzález, para los puestos, respectivamente, de secretario genaral adjunto para Inversiones de Defensa de la OTAN y de secretario general adjunto para Asuntos Políticos.
Sin embargo, ambos no lo tendrán fácil para ser elegidos en la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la OTAN en Varsovia (Polonia) los días 8 y 9 de julio. En primer lugar, porque los rivales son numerosos y de gran valía. Francia e Italia, por ejemplo, han presentado candidatos para los mismos puestos. Además, varios países del Este llevan de candidatos a exministros.
La opción de Argüelles es, a priori, la más débil de las españolas. Curiosamente, por una cuestión ajena a un currículum excelente para dicho puesto -además de su actual cargo, en el pasado fue presidente de Boeing España-. En julio cumplirá 67 años y dentro de la OTAN hay una regla no escrita que bloquea las candidaturas de personas en edad de jubilación.
Por su parte, Alvargonzález tiene como hándicap el no haber trabajado nunca en el seno de la OTAN. Además, la interinidad del Ejecutivo español va en su contra: «Nadie da favores a un Gobierno saliente», aseguran fuentes diplomáticas españolas a The Diplomat. Con todo, España lleva una década sin tener representantes en puestos importantes de la Alianza Atlántica, así que los aliados tendrán difícil el justificar un doble ‘no’ a las candidaturas españolas.