<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, aseguró ayer ante el Congreso que el Consejo de Ministros autorizará el anteproyecto de Ley de Cooperación Internacional antes de que concluya este año, a fin de que pueda ser aprobada en el Parlamento durante el primer semestre de 2022.</strong></h4> Durante su comparecencia ante la Comisión de Cooperación Internacional del Congreso de los Diputados, Albares aseguró que <strong>la futura Ley de Cooperación para el Desarrollo Sostenible y la Solidaridad Global</strong>, que sustituirá a la actual de 1998, pretende llevar a cabo una “reforma en profundidad” de la Cooperación Española. Según Albares, el objetivo del Gobierno es <strong>que el anteproyecto llegue a las Cortes Generales a principios de abril a fin de que pueda aprobarse e durante el próximo periodo de sesiones, que concluye en junio</strong>. A tal fin, el ministró expresó su deseo de contar con <strong>el respaldo de todos los grupos y pidió al PP que, como partido de oposición, tenga la misma actitud que tuvo el PSOE durante la aprobación de la Ley de 1998</strong>, cuando gobernaban los populares. “Hagamos una política de Estado”, añadió. En cuanto a sus contenidos, explicó, la nueva norma prevé <strong>reforzar “el papel central del Ministerio” y, al mismo tiempo, poner en marcha un Consejo Superior de la Cooperación para el Desarrollo</strong> que garantice “una mejor representación y una participación ampliada de los distintos actores del sistema”. Asimismo, establece la creación de <strong>una Comisión Interministerial de Coordinación</strong> y promueve la <strong>cooperación descentralizada</strong> de comunidades autónomas y entidades locales a través de la nueva Conferencia Sectorial de Cooperación para el Desarrollo. El anteproyecto de ley también propone la aprobación de <strong>“un nuevo estatuto” para los trabajadores de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID),</strong> a fin de “reforzar sus capacidades”, y prevé la creación de <strong>una Oficina de Evaluación de la Cooperación Española</strong> encargada de evaluar “el impacto y los resultados” de la Cooperación. Por otra parte, Albares informó de que otro objetivo de la futura Ley es que <strong>al menos el 85% de las acciones de la Cooperación Española contribuyan a reducir la pobreza y la desigualdad, que al menos el 30% permitan hacer frente al cambio climático y otros objetivos medioambientales y que al menos el 85% ayuden a promover la igualdad de género</strong>. Otro de los grandes objetivos de la norma, precisó, será <strong>“la promoción de la calidad de la democracia y el respeto de los Derechos Humanos”</strong> a través del “fortalecimiento de las capacidades de las administraciones públicas para mejorar la cohesión social”. En cuanto a las áreas geográficas prioritarias, la futura Ley introducirá, como “novedad importante”, la región del <strong>Sahel</strong> a causa de “su fragilidad institucional y el impacto directo que su evolución tiene en nuestra seguridad”. <h5><strong>El PP tiende su mano y pide “generosidad”</strong></h5> Durante sus intervenciones, los grupos de la oposición celebraron el anuncio de Albares y ofrecieron su cooperación para sacar adelante el texto. En este sentido, <strong>la portavoz del PP, Paloma Gázquez</strong>, ofreció la “mano tendida” de su partido para que la ley sea “aprobada por una amplísima mayoría” y pidió al Gobierno que muestre la misma “generosidad” que tuvo el Gobierno de José María Aznar con el PSOE durante las negociaciones de la ley de1998. “Aceptamos la invitación a trabajar juntos y rogamos que el PSOE recupere el sentido de Estado”, agregó.