<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El Gobierno de España felicitó ayer a las Repúblicas de Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua con motivo de la conmemoración del Bicentenario de sus independencias. </strong></h4> Ayer se cumplieron doscientos años desde la firma del Acta de Independencia de Centroamérica, por el cual las provincias que conformaban la Capitanía General de Guatemala proclamaron su separación de España. Aquel fue el primer paso para la posterior independencia definitiva de Guatemala, El Salvador, Costa Rica, Honduras y Nicaragua tras el desmantelamiento de la República Federal de Centroamérica (1824-1839). <strong>“Estas celebraciones nos brindan la oportunidad de recordar y poner en valor un rico pasado compartido, así como renovar nuestro compromiso con la región, particularmente en el actual contexto global condicionado por la pandemia de la COVID-19”</strong>, declaró el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado. “Para España es una prioridad actuar de manera solidaria para poder salir juntos de esta crisis sanitaria, por lo que nuestro país está donando millones de vacunas a Iberoamérica y el Caribe”, prosiguió. “El objetivo es no dejar a nadie atrás”, añadió. En su comunicado, España reafirma su <strong>“voluntad de trabajar conjuntamente para que nuestros respectivos pueblos y sociedades puedan satisfacer sus legítimas aspiraciones de desarrollo y progreso, favoreciendo el diálogo político, el desarrollo social y económico, la erradicación de la pobreza y las desigualdades, así como el fortalecimiento del Estado de derecho, la buena gobernanza y los valores democráticos”</strong>. Asimismo, el Gobierno español reafirma el “importante papel” que juega el <strong>Sistema de Integración Centroamericana (SICA)</strong>, que este año celebra su trigésimo aniversario, “por su capacidad para afrontar con éxito los retos presentes y futuros, que siempre ha contado y contará con el apoyo de España”. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se trasladó el pasado mes de junio a San José de Costa Rica para participar, precisamente, en los actos conmemorativos del trigésimo aniversario del SICA y reunirse con los líderes de los países centroamericanos, con quienes abordó, entre otros temas, las crisis de refugiados y desplazados, la pandemia y el cambio climático. <strong>“El Bicentenario coincide también con el 35 aniversario de los procesos de Esquipulas, que dieron lugar a los acuerdos de paz y en los que España acompañó y se implicó”</strong>, prosiguió el comunicado. “No queremos dejar de subrayar en este contexto la valiosa enseñanza que ha significado para las sociedades y los gobiernos centroamericanos, que deben conservar y seguir consolidando en favor del bienestar de todos los ciudadanos”, concluyó. La efeméride coincide con un <strong>grave deterioro de las relaciones diplomáticas entre España y Nicaragua</strong>. El régimen de Daniel Ortega ha acusado a España de “intromisión, injerencia e intervención” por sus comunicados contra las detenciones de políticos opositores y de periodistas en vísperas de las elecciones de noviembre (el último capítulo ha sido la reciente orden de busca y captura emitida por la Fiscalía nicaragüense contra el escritor y ex vicepresidente Sergio Ramírez) e incluso ha recurrido a los GAL, a Cataluña y a la “feroz y brutal historia colonial y neocolonial” para criticar al Gobierno. El pasado 11 de agosto, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, llamó a consultas a la embajadora de España en Managua, María del Mar Fernández-Palacios.