<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>La segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Ecuador, celebrada este domingo, presenta un panorama muy diferente entre los electores residentes en España y los votantes del conjunto del país andino.</strong></h4> Según los datos oficiales del CNE (Consejo Nacional Electoral) para el conjunto del país, con casi el 99% de las actas contabilizadas, <strong>Guillermo Lasso</strong>, líder de la Alianza CREO-Partido Social Cristiano, alcanza el 52,4% de los votos en su tercer intento por llegar a la presidencia ecuatoriana, frente al 47,6% de <strong>Andrés Arauz</strong>, candidato del partido Unión por la Esperanza (UNES) y heredero político del ex presidente izquierdista Rafael Correa. Lasso asumirá oficialmente el cargo el próximo 24 de mayo. En cambio, los resultados entre los casi 173.000 ecuatorianos con derecho a voto residentes <strong>en España</strong> arrojan <strong>una amplia victoria de Arauz</strong>, quien el 100% de los votos escrutados obtiene el 66,65% de los votos, frente al 33,5% del futuro presidente de Ecuador. Aparte, <strong>en España la abstención superó el 62%</strong>, frente al 21% del conjunto de Ecuador. En Murcia, donde se concentran casi 30.000 electores ecuatorianos, la victoria del candidato izquierdista es aún más amplia, con un 75% de los votos. En el resto de España, los porcentajes son similares al conjunto, con un 63% para Arauz en Madrid (donde existe la comunidad más amplia, con casi 67.000 electores) y un 65% para el candidato izquierdista en Barcelona (con casi 37.000 electores). El 62% del padrón electoral ecuatoriano en el exterior se encuentra en la circunscripción de Europa, Asia y Oceanía. <strong>España concentra el 71% del voto en la circunscripción de Europa, Asia y Oceanía y el 43% del voto en el extranjero. </strong> Según informó la Embajada de Ecuador en España, los 375 recintos electorales distribuidos por España cumplieron con las medidas de bioseguridad, ventilación, desinfección y distanciamiento social recomendadas por el CNE y por las Comunidades Autónomas respectivas, e incluyeron puntos de control de temperatura, provisión de gel hidroalcohólico, mascarillas, y equipos de protección. El recinto electoral más amplio fue el Pabellón de Cristal de Madrid.