<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El Gobierno de España saludó ayer el acuerdo al que llegó este pasado viernes el Foro de Diálogo Político Libio para la formación de un nuevo gobierno en el país norteafricano.</strong></h4> <strong> </strong> En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores agradeció <strong>“la mediación de la ONU”, y particularmente de la Representante Especial del Secretario General de Naciones Unidas para Libia (RESGNU interina), Stephanie Williams</strong>, y recordó que “la principal misión de este gobierno temporal será la de celebrar elecciones a final de este año y promover el respeto del alto fuego en todo Libia”. <strong>“El Gobierno de España confirma su mejor disposición para continuar colaborando en el refuerzo de las relaciones bilaterales, en la culminación del proceso político libio y en la construcción de un entorno regional estable y próspero”</strong>, concluyó. El nuevo gobierno acordado por el Foro de Diálogo Político Libio (FDPL), auspiciado por la ONU, tendrá la misión de superar seis años de guerra civil y llevar al país a unas elecciones el próximo 24 de diciembre. <strong>El acuerdo de gobierno podría facilitar la reapertura formal de las actividades de la Embajada en Libia, de la que España evacuó a todo su personal a finales de julio de 2014 a causa de la intensificación de los enfrentamientos entre distintas milicias armadas</strong>. Al respecto, fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores indicaron este pasado viernes que, aunque todavía no hay “ninguna novedad sobre la reapertura de la Embajada”, <strong>el Gobierno está a la espera de que los esfuerzos de la ONU permitan asentar la situación en Libia, en cuyo caso el Ministerio “empezaría a valorar seriamente la posibilidad”.</strong> Aunque oficialmente la Embajada no fue cerrada y siempre ha habido un embajador nombrado para Libia, en la práctica, los asuntos relativos a ese país se han seguido durante los últimos seis años desde Túnez. En Trípoli quedaron la Cancillería y la residencia del embajador, dotadas de las adecuadas medidas de seguridad para su funcionamiento. De momento, el único país europeo que mantiene Embajada permanente en Libia es Italia. <strong>El actual embajador, Javier García-Larrache</strong>, que fue nombrado el pasado 7 de julio, ha aumentado en los últimos meses la frecuencia de sus viajes a Trípoli para mantener contactos con los distintos actores políticos y económicos implicados en el conflicto libio. Aparte, la ofensiva española para recuperar presencia en el país magrebí experimentó un sensible impulso con la visita que a comienzos de septiembre realizó a Libia <strong>la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya. </strong>
