<h6><strong>Eduardo González </strong></h6> <h4><strong>La recuperación económica “anclada en las transiciones verde y digital”, las vacunaciones contra el COVID-19, el fortalecimiento del Pilar Social Europeo y el refuerzo de la autonomía estratégica “sin proteccionismos” son las grandes prioridades de la cuarta presidencia portuguesa del Consejo de la UE, que estará también marcada por la próxima llegada de Joe Biden a la Casa Blanca.</strong></h4> “La feliz coincidencia entre la presidencia portuguesa y la celebración del 35 aniversario de la adhesión simultánea de Portugal y España a la entonces Comunidad Europea nos anima y nos da fuerzas” para afrontar los retos, declaró <strong>la secretaria de Estado de Asuntos Europeos de Portugal, Ana Paula Zacarias</strong>, durante su participación en el evento telemático <em>Presidencia de Portugal del Consejo de la UE. Tiempo de actuar: por una recuperación justa, verde y digital</em>, organizado por <strong>el Real Instituto Elcano y la Embajada de Portugal.</strong> “Vamos a empezar la cuarta presidencia portuguesa en un momento extremadamente difícil, con la mayor crisis económica y sanitaria desde la Segunda Guerra Mundial, pero también lo hacemos animados por la capacidad de trabajar en conjunto con todos los Estados miembros para obtener resultados y que los ciudadanos vean el valor de la UE”, prosiguió Zacarias durante el encuentro, que fue presentado por <strong>el embajador de Portugal en España, João Mira-Gomes, y el presidente del Real Instituto Elcano, Emilio Lamo de Espinosa, y moderado por el director de este <em>think tank</em>, Charles Powell.</strong> Según la secretaria de Estado, la <strong>presidencia alemana</strong> realizó una “labor extraordinaria” en materias como la gestión del <em>Brexit </em>o las vacunas contra el COVID-19 y ayudó a que “los líderes europeos y el Parlamento Europeo hayan sido capaces de tomar decisiones muy importantes en materia financiera y presupuestaria de la Unión y en la creación de un mecanismo de recuperación y resiliencia con un monto suficiente para salir de la crisis”. “Ya tenemos los instrumentos financieros, ahora se trata de implementarlo todo”, prosiguió. La recuperación económica, aseguró Zacarias, es “la gran prioridad” de la presidencia, pero para ello es necesario que se terminen de elaborar <strong>“los planes nacionales de recuperación y resiliencia, para que los puedan aprobar la Comisión y el Consejo y para que podamos hacer un primer desembolso en junio”</strong>. “Sin estos planes nacionales en marcha”, advirtió, “será muy difícil atender a las tremendas dificultades económicas, financieras y sociales de la tercera ola” de la pandemia. La otra gran prioridad, añadió, es la “puesta en marcha y el monitoreo” de las vacunaciones contra el COVID-19 “por la salud de los ciudadanos y para que se puedan abrir las fronteras y pueda funcionar el mercado interior”. En cuanto a las relaciones con la futura administración norteamericana, Zacarias aseguró que “la UE ya ha presentado una nueva agenda trasatlántica que le gustaría hacer con Estados Unidos”. “Biden ha dado señales de estar disponible para empezar a trabajar en esta agenda, pero no está claro que ocurra en el primer semestre, porque la agenda interna le va a requerir mucho tiempo”, admitió. No obstante, aseguró, <strong>“a la Presidencia portuguesa le gustaría muchísimo que hubiera una primera reunión con Biden, aprovechando un posible viaje a Bruselas para una reunión de la OTAN o combinándonos para que pueda venir a Bruselas en este semestre”.</strong> En este encuentro, explicó, las dos partes podrían “empezar a hablar de temas como la seguridad y la defensa, la política exterior o la agenda tecnológica, defendiendo los intereses de la UE pero lanzando un puente de cooperación con Estados Unidos”. También se abordaría “la agenda comercial, porque necesitamos sentarnos a la mesa y empezar a trabajar con claridad y en el marco multilateral para la reforma OMC, muy debilitada por la posición de Estados Unidos”, agregó. Aparte, “es importante que la UE, Estados Unidos con Biden y China estén en la misma línea de refuerzo del multilateralismo” para trabajar en esta dirección “en nuestra relación trilateral”. Respecto a otros asuntos internacionales, la secretaria de Estado aseguró que Portugal y España están “muy unidas” en favor de la política europea hacia <strong>América Latina</strong>, “la región más cercana a Europa y con la que deberíamos tener muchos más puentes y más empatía”. Asimismo, afirmó que <strong>el alto representante de Política Exterior y de Seguridad de la UE, Josep Borrell, y el Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE) deben jugar un “papel central de coordinación” de la política europea hacia Venezuela</strong> para “evitar la cacofonía” entre los diferentes Estados miembros. “En el Consejo se produce esa cacofonía, pero la imagen desde fuera debe ser de coordinación” a fin de que la UE pueda “promocionar todas las vías posibles de diálogo que permitan encontrar una solución”, concluyó.