<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, confirmó ayer en Praga que, antes del próximo Consejo Europeo de finales de octubre, mantendrá una reunión en París a tres bandas con el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y el primer ministro portugués, António Costa, para abordar el tema de las interconexiones energéticas, incluido el gasoducto transpirenaico MidCat, al que en principio se opone Francia.</strong></h4> La reunión fue acordada ayer por los tres dirigentes en los márgenes del <strong>Consejo Europeo Informal de Praga</strong>, en el que se abordó la guerra de Rusia en Ucrania, la crisis energética y la situación económica en la UE. Según Sánchez, el propósito inicial de los tres Gobiernos era anunciar este encuentro de París mediante “un comunicado conjunto”, pero el propio presidente del Gobierno se vio finamente obligado a confirmar la reunión, durante la rueda de prensa posterior al Consejo, después de constatar que el propio Macron ya lo había filtrado a la prensa. “Queríamos ser discretos”, admitió el presidente del Gobierno. En todo caso, confirmó, <strong>“va a haber una reunión en París antes del Consejo Europeo para hablar sobre las interconexiones, no solo de gas sino también de hidrógeno, que son perfectamente compatibles, y sobre las interconexiones eléctricas, que algunas tenemos entre España y nuestra vecina Francia”</strong>. La reunión de París, prosiguió, <strong>“demuestra la voluntad del Gobierno francés de encontrar una solución que responda a sus demandas domésticas”. </strong> Estas informaciones se producen un día después de que Macron volviese a dejar claro su rechazo a MidCat, el gasoducto que uniría a la península Ibérica con el resto de la UE a través de los Pirineos, por considerar que antes se deben priorizar las interconexiones eléctricas. Durante el Consejo Europeo informal de ayer, Sánchez planteó la necesidad de impulsar las interconexiones y, por tanto, el gasoducto MidCat (que Alemania ha apoyado expresamente en numerosas ocasiones) tanto ante el resto de líderes de la UE como individualmente con el propio Macron. “De una manera u otra, antes que después, vamos a llegar a un acuerdo que case con todas las sensibilidades y preocupaciones de Francia”, aseguró. “No voy a decir que soy optimista”, pero <strong>“estoy convencido de que se puede lograr un buen acuerdo con un amigo y aliado como el Gobierno francés”</strong>, agregó. Por otra parte, y también en relación con el tema energético, Pedro Sánchez reiteró su apoyo a la reciente carta de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Layen, con medidas para afrontar la crisis energética. “España se reconoce en esas propuestas”, aseguró. “La Comisión recoge muchas propuestas y planteamientos del Gobierno español desde antes de la guerra”, como la fijación de un tope al precio del gas que importa Europa, la compra conjunta y centralizada de gas a terceros países, la reforma estructural del mercado eléctrico y la extensión al resto de la UE del llamado “mecanismo ibérico” de gestión energética (que entró en vigor el pasado 15 de junio y limita el precio del gas para la generación eléctrica durante un periodo de doce meses, cubriendo así el próximo invierno, cuando los precios de la energía son más caros). <strong>“Hay que estar orgullosos, porque cada vez más países de Europa pretenden importar esta excepción ibérica para convertirla en una norma común europea”</strong>, destacó Pedro Sánchez. Durante su intervención en el Consejo, Sánchez anunció que España destinará parte de los recursos de <em>RepowerEU</em> a completar la interconexión gasista hasta la frontera con Francia. Esta interconexión, que podría estar lista en unos ocho meses, sería además compatible con el hidrógeno. Asimismo, y en lo que respecta a la reforma del mercado eléctrico de la UE, Sánchez pidió que éste se adapte en favor de una mayor penetración de las energías renovables y del autoconsumo. <h5><strong>Guerra de Ucrania, seguridad alimentaria, reglas fiscales</strong></h5> En cuanto a la <strong>guerra en Ucrania</strong>, los líderes europeos aprobaron esta semana <strong>el octavo paquete de sanciones contra el régimen ruso</strong> y denunciaron la anexión ilegal de los territorios ucranianos de Jersón, Zaporiyia, Donetsk y Lugansk. “España no va a reconocer nunca esta modificación unilateral de las fronteras, que es contraria al Derecho Internacional, y va a seguir ayudando al pueblo de Ucrania en su defensa de la democracia, de la libertad, de la legalidad internacional y de los derechos humanos”, manifestó el presidente ante el resto de líderes europeos. Pedro Sánchez también mostró su preocupación por una de las consecuencias de la guerra, como es <strong>la falta de seguridad alimentaria.</strong> “En Europa debemos asegurarnos de que la guerra de Putin no genera una crisis alimentaria a nivel global”, advirtió el presidente, quien insistió en la necesidad de que se prorrogue el acuerdo de exportación de grano que ha permitido transportar desde Ucrania, a través del Mar Negro, cerca de 3,7 millones de toneladas de cereales. Los 27 también abordaron <strong>la próxima reforma de las reglas fiscales europeas</strong> y, al respecto, el presidente Sánchez defendió la necesidad de revisarlas para cumplir el doble objetivo de preservar unas finanzas públicas sólidas y reforzar un crecimiento sostenible mediante el incremento de la inversión pública y privada en ámbitos dirigidos a la transición verde y digital.
