<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>La Cumbre Hispano-Alemana, celebrada ayer en A Coruña, no abordó la posible participación de España en el sistema conjunto europeo de defensa antimisiles dirigido por Alemania, pero el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se comprometió a “estudiarlo” cuando “sea objeto de debate”, como “no puede ser de otra manera”.</strong></h4> Un total de quince ministros de ambos países participaron ayer en la vigesimoquinta Cumbre Hispano-Alemana, en la que se abordaron los grandes asuntos de la agenda europea y bilateral, con especial atención a la guerra en Ucrania y a la reforma del mercado energético europeo. No obstante, los prolegómenos de la reunión se vieron afectados por unas declaraciones de <strong>la embajadora de Alemania en España, María Margarete Gosse</strong>, a la Cadena SER en las que aseguró que los dos países mantenían “conversaciones a bajo nivel” <strong>sobre la posible participación de España en el sistema de defensa multilateral liderado por Berlín</strong> e incluso dio a entender que ese tema podría tratarse durante la Cumbre en Galicia. Tras estas declaraciones, Moncloa aseguró en un comunicado que <strong>el Gobierno de España no había “recibido ninguna propuesta o comunicación al respecto” y la ministra de Defensa, Margarita Robles, declaró que, “hasta la fecha”, no tenía “ningún conocimiento” </strong>sobre esta supuesta propuesta que, “al parecer”, está “todavía en estudio por parte de Alemania”. En la rueda de prensa posterior a la Cumbre bilateral, <strong>Pedro Sánchez</strong> declaró ayer que “la relación bilateral, europea y en la OTAN entre Alemania y España es extraordinaria y múltiple”, pero, a renglón seguido, aseguró que <strong>no se había “tratado el tema” del escudo antimisiles en la reunión de A Coruña. “No fue objeto de discusión, pero, en todo caso, cuando sea objeto de debate lo estudiaremos, como no puede ser de otro modo”</strong>, añadió. Por su parte, <strong>el canciller alemán, Olaf Sholz, aseguró en la misma rueda de prensa que no se había abordado el tema del escudo, “tampoco estaba en la agenda”, y precisó que, en cualquier caso, se trata de una “medida política que ha salido de Alemania para la defensa de Alemania”</strong>, por considerar que es “urgente” dotar al país de “un escudo de defensa antiaéreo” que también beneficie, sobre todo, a “los países vecinos”. “Es un reto para muchos años, pero no hemos hablado de ello”. El pasado mes de septiembre, la ministra de Defensa alemana, Christine Lambrecht (presente en la Cumbre), declaró a Reuters que el objetivo de su Gobierno es llegar a un acuerdo con otros países de la OTAN sobre el sistema de defensa aérea durante la reunión que se celebrará en Bruselas los días 12 y 13 de octubre. <h5><strong>El gasoducto MidCat</strong></h5> Por otra parte, España y Alemania adoptaron ayer <strong>una Declaración Conjunta que recoge también un Plan de Acción </strong>anejo en el que se estructura y renueva la relación bilateral a través de múltiples iniciativas en los distintos ámbitos. Aparte, los dos Gobiernos firmaron dos acuerdos de colaboración en materia socio-laboral y en educación superior y formación. La Declaración Conjunta reitera el compromiso de España y Alemania “con el fomento de iniciativas para aumentar la capacidad de acción de la Unión Europea y para fortalecer su resiliencia, complementariamente con la OTAN y de manera que ambas se refuercen mutuamente” y defiende, en este sentido, la importancia de reforzar la cooperación en materia de armamento e industria de defensa para fortalecer las capacidades europeas en dicha materia. Asimismo, los dos países expresan su apoyo a Ucrania y su deseo de discutir y llegar a acuerdos sobre el futuro desarrollo de las reglas fiscales europeas. <strong>La Declaración Conjunta aboga también “por una mayor capacidad de interconexión de la Península Ibérica para mejorar su contribución a la seguridad del suministro a toda la UE” </strong>y advierte, por ello, de que es de “suma importancia” que el gasoducto MidCat -que comunicaría la Península Ibérica con el resto de la UE a través de Francia- esté operativo en 2025. <strong>“La construcción de un gasoducto listo para el hidrógeno lo suficientemente grande a través de los Pirineos para que esté operativo en 2025 es de suma importancia para lograr un mercado interior de energía verdaderamente sólido dentro de la UE, acelerar la transición verde y reforzar la autonomía estratégica de la UE”,</strong> se lee en la declaración. Esta postura se contradice con la posición del <strong>presidente de Francia, Emmanuel Macron</strong>, quien el pasado mes de septiembre se negó a dar el visto bueno a este gasoducto -pese a contar con el respaldo de la Comisión Europea- por considerar que no se necesitan nuevas interconexiones de gas con España porque las actuales están muy lejos de la saturación. Al respecto, <strong>Olaf Scholz</strong> aseguró en la rueda de prensa que es necesario “garantizar el abastecimiento” tanto de gas como de hidrógeno y, para ello, es <strong>“clave el gasoducto MidCat para conectar a la península Ibérica con la Europa central”. Por ello, “doy mi apoyo, de manera explícita, a la interconexión”,</strong> añadió. “Hacen falta más interconexiones en Europa”, insistió. “Algo que ahora puede no ser rentable puede que lo sea más adelante y, por ello, lo mejor es tener esa interconexión”. Por su parte, <strong>Sánchez advirtió de que “las interconexiones son buenas para Francia, para Alemania y para Europa” y representan una “mayor tranquilidad” porque aportan “más alternativas energéticas” </strong>y ayudan a poner fin a la dependencia energética de Rusia. “Sería un corredor de hidrógeno, no solo de gas, y España quiere ser en 2030 una potencia exportadora de hidrógeno verde, de energía limpia procedente de las renovables”, agregó. Este tema “no compete a las relaciones bilaterales de la península Ibérica con Francia, es un desafío europeo”, concluyó. La Cumbre contó con la participación, por parte de España, de <strong>las tres vicepresidentas del Gobierno (Nadia Calviño, Yolanda Díaz y Teresa Ribera) y los ministros de Asuntos Exteriores, Defensa, Industria, Comercio y Turismo; Agricultura, Pesca y Alimentación y Universidades. Por su parte, Olaf Scholz viajó acompañado por el vicecanciller y ministro de Economía, Robert Habeck, y los ministros de Finanzas, Asuntos Exteriores, Defensa, Trabajo, Investigación y Ciencia y Agricultura. </strong> La Cumbre se produjo a fechas de la visita oficial de Pedro Sánchez a Berlín, que tendrá lugar los días 13 a 15 de octubre, y de la visita de Estado del Rey Felipe VI, quien el 18 de octubre inaugurará junto al presidente alemán, Frank Walter Steinmeier, la Feria del Libro de Fráncfort, en la que España figura como invitada de honor. Por otra parte, Pedro Sánchez participó a finales de agosto en una reunión del Consejo de Ministros de Alemania, por invitación expresa de Olaf Scholz, a fin de compartir la experiencia del Gobierno español en la elaboración de su Estrategia de Seguridad Nacional.