<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong> El impacto de la pandemia del COVID-19 en el desplazamiento de personas y bienes y en la actividad económica ha contribuido a disminuir la presencia global de la mayor parte de los países del mundo, con la notable excepción de China, que ha incrementado su peso a pesar de ser el país de origen del coronavirus. En este contexto, España figura como el país que ha perdido el mayor volumen de presencia global debido a los “enormes retrocesos” en sus </strong><strong>“</strong><strong>dimensiones económica y blanda</strong><strong>”</strong><strong>.</strong></h4> Estas son algunas de las principales conclusiones del <a href="https://media.realinstitutoelcano.org/wp-content/uploads/2022/07/informe-elcano-presencia-global-2022.pdf" target="_blank" rel="noopener noreferrer"><strong>Informe de Presencia Global 2022 del Real Instituto Elcano</strong></a>, que fue presentado ayer por <strong>el presidente del Think Tank, José Juan Ruiz, y los investigadores Iliana Olivié y Manuel Gracia Santos</strong> en la sede de la Fundación Botín en Madrid. “Antes del estallido de la pandemia, la globalización ya mostraba signos de fatiga” y, de hecho, “la suma del valor del Índice Elcano de Presencia Global para los 150 países para los que lo calculamos había alcanzado su máximo en 2015”, señala el documento. En lo que respecta a 2021, los nuevos datos muestran una contracción de este valor agregado de un 2,35% respecto del año anterior, lo que supone la mayor caída anual de toda la serie temporal (que comienza en 1990), “superior a la que se produjo tras la desintegración del bloque soviético”, explicó Iliana Olivié. El estudio revela también que, de las tres dimensiones de presencia económica, militar y blanda que se suelen analizar en este estudio, esta última ha sido la más golpeada por esta contracción (7% entre 2020 y 2021), a pesar de que los intercambios blandos (ciencia, tecnología, cultura, migraciones o turismo) habían mostrado el “mayor dinamismo durante las dos últimas décadas”. <strong>“</strong><strong>Se ha desplomado la dimensión blanda”, lo cual “no es sorprendente después de un año de confinamientos e interrupción de los movimientos de personas”</strong>, explicó Olivié. El informe recoge la evolución de la presencia global entre 2020 y 2021 en 150 países que representan más del 98 de la población y de la economía mundial. A causa del periodo de tiempo analizado, el documento no recoge “los efectos de la guerra en Ucrania”, precisó la investigadora, quien, no obstante, se atrevió a hacer un diagnóstico. <strong>“Para los próximos años, la mera inflación va a tener un impacto en la presencia global agregada, no solo por la caída de las inversiones, sino por su influencia en la proyección cultural y en el turismo y en la subida de los precios de la energía”</strong>, explicó. Aparte, <strong>“se prevé un aumento de la presencia global de Rusia en lo militar, de Ucrania a través de variables como información o migraciones y de EEUU y de la UE a través de la cooperación al desarrollo”</strong>, añadió. <h5><strong>EEUU, China y la UE</strong></h5> El estudio indica también que, al igual que en ediciones anteriores del Índice Elcano de Presencia Global, el ranking de los 20 primeros países se mantiene relativamente estable, con el mismo grupo de países ocupando posiciones similares durante varios años consecutivos y mostrando que, a pesar de los cambios geopolíticos y geoeconómicos descritos en ediciones anteriores de este informe, “Occidente y/o el Norte siguen acaparando gran parte de la presencia global agregada”. No obstante, <strong>el documento revela también que, aunque EEUU sigue manteniendo la primera posición, China ha ganado “un enorme volumen de proyección exterior” y sigue “reduciendo la brecha de presencia global con respecto a Estados Unidos”</strong>, de tal manera que el valor del índice de presencia global del gigante asiático es ahora 2,3 veces inferior al del gigante norteamericano, cuando hace solo un año era 2,9 veces menor. “La presencia global está desplazándose de Europa a Asia, y no es una tendencia de un año para otro, es una tendencia que se da desde hace tiempo”, destacó José Juan Ruiz. En lo que respecta a <strong>la UE</strong>, “si la tomamos como un único país, su grado de internacionalización es mayor que las dos potencias que luchan por la hegemonía, Estados Unidos y China”, prosiguió Ruiz. De hecho, según el informe, la UE registra un valor índice de presencia global de 3.377 puntos en 2021, superior al de Estados Unidos (3.241) y muy superior al de China (1.365). Sin embargo, entre 2020 y 2021, <strong>coincidiendo con la pandemia del COVID-19 y con la materialización del <em>Brexit</em>, la presencia global de la UE ha disminuido en 300 puntos, mientras que la proyección exterior de Estados Unidos ha caído sólo en seis puntos y la de China ha aumentado en 62.</strong> “La salida de Reino Unido de la UE ha afectado a la proyección exterior de la Unión, con un mantenimiento de la proyección económica a pesar de la pandemia, una fuerte caída de la proyección blanda y una pérdida de la presencia militar”, explicó Manuel Gracia Santos. “Las potencias mundiales despliegan su presencia en todos los ámbitos, económico, militar y blando”, pero “la presencia global de Europa es, sobre todo, económica”, añadió. <h5><strong>España</strong></h5> En estas circunstancias, el informe indica que “<strong>España es el país que pierde el mayor volumen de presencia global de entre los 150 países para los que calculamos el Índice, a pesar de conservar su decimotercera posición”</strong>. Concretamente, la presencia global de España ha disminuido un 11% en sólo un año, debido a los “enormes retrocesos de sus dimensiones económica (-12%) y blanda (-16%)”. La <strong>dimensión económica</strong> se ha visto especialmente afectada en las variables de energía (-37%), ya que las exportaciones de combustibles son un componente importante de las ventas de España al exterior, y de servicios (-41%), un “fenómeno fuertemente relacionado con la caída de las exportaciones de bienes y con los confinamientos y limitaciones a la movilidad humana, incluido el turismo”, según el informe. Aparte, “todas las variables de la presencia blanda española disminuyen respecto al año anterior, con la única excepción de la ciencia, siguiendo la tendencia mundial”, prosigue el estudio<strong>. Los mayores descensos en esta dimensión blanda son los del turismo (-57%)</strong> <strong>y la cultura (-17%) “que son, precisamente, dos importantes canales de proyección exterior del país”.</strong>