<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>Los jefes de Estado o de Gobierno de la OTAN adoptaron ayer el tan esperado <a href="https://www.nato.int/nato_static_fl2014/assets/pdf/2022/6/pdf/290622-strategic-concept.pdf" target="_blank" rel="noopener noreferrer">Concepto Estratégico de Madrid</a>, en el que se incluye por primera vez una mención expresa a su Flanco Sur, tal como había pedido reiteradamente España, y se reafirma el compromiso de la Alianza con “la soberanía e integridad territorial de todos los aliados”, lo cual, a juicio de Moncloa, garantiza la protección de Ceuta y Melilla sin necesidad de mencionarlas expresamente.</strong></h4> Durante su intervención en la primera sesión de la Cumbre de la OTAN, que comenzó ayer en el recinto de IFEMA en Madrid, <strong>el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez</strong>, señaló el “compromiso de España” con el refuerzo de la postura de la disuasión y defensa de la OTAN en el Flanco Este, una prioridad que “no compite con la necesidad de tener <strong>un enfoque de seguridad de 360 grados” orientado hacia el Flanco Sur, ya que, advirtió, las amenazas que vienen del Sur son, cada vez más, “amenazas rusas”. </strong> Precisamente, <strong>el Concepto Estratégico menciona por primera vez al “Flanco Sur”</strong>. Concretamente, el nuevo documento advierte de que “la vecindad meridional de la OTAN, en particular las regiones de Oriente Medio, África del Norte y el Sahel, se enfrenta a retos interconectados de seguridad, demográficos, económicos y políticos”, unos retos que “se ven agravados por el impacto del cambio climático, la fragilidad de las instituciones, las emergencias sanitarias y la inseguridad alimentaria”. “Esta situación proporciona un terreno fértil para la proliferación de grupos armados no estatales, incluidas las organizaciones terroristas, y también permite la injerencia desestabilizadora y coercitiva de competidores estratégicos”, añade. <strong>La necesidad de atender al Flanco Sur ha sido una de las reclamaciones más recurrentes del Gobierno español de cara a la Cumbre</strong>. En una <strong>Tribuna publicada el pasado lunes por <a href="https://thediplomatinspain.com/2022/06/espana-ante-una-cumbre-de-la-otan-crucial/" target="_blank" rel="noopener noreferrer"><em>The Diplomat</em></a>,</strong> <strong>el</strong> <strong>ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares</strong>, insistió en que “el Flanco Sur debe quedar reflejado en el Concepto Estratégico de Madrid y en la Cumbre”. “España ya está realizando importantes esfuerzos en la vecindad meridional, como demuestra nuestra participación en la EUTM Mali o nuestra presidencia de la Alianza Sahel de apoyo al G5, pero es importante reforzar el compromiso de la OTAN en una región desde donde se ciernen distintas amenazas”, añadió el ministro. Al término de la primera jornada de la Cumbre, Albares participó en una cena de trabajo de los ministros de Asuntos Exteriores, a la que asistieron los representantes de dos países socios de la OTAN, Jordania y Mauritania, y en la que se analizó el nuevo enfoque de la Alianza en su vecindad sur. <strong>En declaraciones a la prensa al término de la primera jornada de la Cumbre, Albares celebró la mención del Flanco Sur en el Concepto Estratégico </strong>y la inclusión, “como ha venido pidiendo España”, de los ciberataques, el terrorismo, el “uso político inaceptable de los movimientos migratorios irregulares” y el “uso político inaceptable como arma de los flujos energéticos para golpear nuestra soberanía e integridad territorial” entre las amenazas procedentes del sur. No obstante, aseguró que la referencia al Flanco Sur no va contra “nadie”, en respuesta a una pregunta sobre la crisis entre Turquía y Grecia y sobre la implicación de Marruecos en la entrada masiva de 10.000 migrantes en Ceuta como medio para presionar a España. Aparte, el Concepto Estratégico -un documento que servirá de guía para el futuro de la organización y que sustituye al actual de 2010- también señala que, <strong>“aunque la OTAN es una Alianza defensiva, nadie debe dudar de nuestra fuerza y determinación para defender cada centímetro de territorio aliado, preservar la soberanía e integridad territorial de todos los Aliados y prevalecer contra cualquier agresor”.</strong> Tanto esta frase como la mención al “compromiso de defendernos mutuamente, tal y como se consagra en el Artículo 5 del Tratado del Atlántico Norte”, parecen satisfacer otro de los grandes objetivos de España en esta Cumbre: <strong>la protección de la soberanía española sobre Ceuta y Melilla gracias a la cláusula de defensa colectiva de la OTAN</strong>, independientemente de que las dos Ciudades Autónomas figuren o no figuren expresamente citadas en los documentos oficiales de la Alianza. El pasado lunes, <strong>el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg</strong>, declaró durante una rueda de prensa en Bruselas previa a la Cumbre de Madrid que “el Artículo Sexto del Tratado de Washington define el ámbito geográfico de aplicación de nuestra garantía de defensa colectiva, el Artículo Quinto”, que incluye “el territorio de cualquiera de las partes en Europa y América del Norte o las islas bajo la jurisdicción de cualquiera de las partes en el área del Atlántico Norte, al norte del Trópico de Cáncer”. De acuerdo con estas palabras, Ceuta y Melilla (al igual que Hawai o las Malvinas) quedarían fuera de esa protección por encontrarse en territorio africano, mientras que las islas Canarias sí estarían cubiertas porque ser un territorio insular ubicado al norte del Trópico de Cáncer. No obstante, fuentes de Moncloa aseguraron ayer a varios medios que <strong>el texto aprobado ayer en Madrid, con su mención a “la soberanía e integridad territorial de todos los Aliados” frente a “cualquier agresor”, despeja cualquier duda sobre la protección de Ceuta y Melilla bajo el paraguas de la cláusula de seguridad de la OTAN.</strong> En este sentido, recordaron que los términos “soberanía e integridad” prácticamente habían desaparecido en el anterior Concepto Estratégico de 2010, por lo que su mención explícita en el apartado de <em>Disuasión y defensa</em> introduce “un matiz pequeño pero relevante”. <h5><strong>Rusia, Zelenski y Finlandia y Suecia</strong></h5> En cuanto al resto del Concepto Estratégico, el texto señala que <strong>Rusia es “la amenaza más directa y significativa” para “la seguridad, la paz y la estabilidad euroatlántica”,</strong> aborda por primera vez <strong>los “desafíos” que plantea China </strong>a “la seguridad, los intereses y los valores que defiende la OTAN” y establece las <strong>tres tareas principales de actuación de la Alianza para este muevo periodo: disuasión y defensa, prevención y gestión de crisis y seguridad cooperativa.</strong> <strong> </strong> Durante las reuniones de ayer, <strong>los jefes de Estado y de Gobierno de la OTAN acordaron formalmente invitar a Finlandia y a Suecia a adherirse a la Alianza Atlántica</strong>, un día después de que Turquía levantase el veto contra estos dos países tras una intensa reunión de cuatro horas en la que participó Jens Stoltenberg. El próximo martes, los Estados miembros de la OTAN firmarán en Bruselas el protocolo de adhesión de Suecia y Finlandia, tras lo cual corresponderá a cada uno de los 30 Estados ratificar la adhesión a título individual. Pedro Sánchez se refirió a este asunto durante la segunda sesión de la Cumbre, celebrada por la tarde, en la que felicitó a los presidentes de Turquía y Finlandia y al primer ministro de Suecia por el acuerdo alcanzado el lunes y por el apoyo de Stoltenberg, que abre la puerta a la adhesión de “dos importantes democracias” que “nos hará más fuertes”. El presidente de Gobierno mantuvo también un encuentro con la primera ministra sueca, Magdalena Andersson, a la que reiteró el apoyo de España a la entrada de Suecia, “una democracia consolidada cuya adhesión a la Alianza Atlántica contribuirá a fortalecer la capacidad de disuasión y defensa de los flancos norte y este”. Uno de los momentos más esperados en la jornada de ayer fue la intervención por videoconferencia del <strong>presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski</strong>, quien reclamó una “respuesta firme a las acciones de Rusia”. “No es una guerra de Rusia solo contra Ucrania, es una guerra por el derecho a dictar las condiciones en Europa, por el futuro del orden mundial y por eso es absolutamente necesario apoyar a Ucrania con armas, políticas y medidas económicas, como sanciones que impidan que Rusia financie la guerra”, afirmó el mandatario ucraniano, quien expresó su deseo de poder participar como invitado en la Cumbre de 2023 de forma presencial. Tras la intervención de Zelenski, Pedro Sánchez declaró ante la Cumbre que la guerra en Ucrania es “un desafío existencial para todos” y destacó que el pueblo de Ucrania ha demostrado “una resolución impresionante por los valores consagrados en el Tratado de Washington y que nos definen como sociedades libres: su lucha por la democracia, la libertad individual y el estado de derecho”. “Las fronteras de Ucrania son hoy, más que nunca, nuestras fronteras”, agregó.