<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El Consejo de Administración de RTVE se reunirá este martes para decidir si España participa en el Festival de Eurovisión en el caso de que lo haga Israel. De darse este caso, según ha informado el ente público, el presidente de RTVE, José Pablo López, propondrá durante la reunión la retirada de España.</strong></h4> El Consejo está compuesto por quince miembros: cinco elegidos por el PSOE, cuatro por el PP, dos por Sumar y los restantes por Junts, Esquerra Republicana, PNV y Podemos. Fuentes de RTVE recogidas por el diario <em>20 Minutos</em> han asegurado que en el Consejo de Administración hay “mayoría” de quienes no ven “oportuno” que Israel participe en el certamen a causa de las graves violaciones de derechos humanos en Gaza. Otras televisiones públicas también se enfrentan al debate entre apoyar un boicot a la KAN, la televisión pública israelí, o tratar de mantener la supuesta neutralidad del concurso. Es el caso de las televisiones públicas de Islandia, Irlanda, Países Bajos y Eslovenia, que se negarán a participar si lo hace Israel. Al respecto, la cadena neerlandesa AVROTROS ha denunciado en un comunicado el “grave y continuo sufrimiento humano en Gaza” y ha recordado que Eurovisión nació en 1956 para unir a Europa tras la guerra. Por tanto, de salir adelante la propuesta, España se convertiría en el quinto país en anunciar su retirada de Eurovisión en el caso de la participación de Israel. También sería el primer país del Big Five —los cinco países que más aportan económicamente a la UER— en tomar esta decisión. El pasado mes de abril, según informó la cadena pública en su página web, RTVE envió una carta a la Unión Europea de Radiodifusión (UER) en la que solicitaba la apertura de un debate sobre la participación de Israel en el festival. En el comunicado, subrayaba la necesidad de reconocer la división de opiniones y facilitar un espacio de reflexión entre todas las emisoras y miembros de la UER. El director del festival, Martin Green, ha indicado que desde Eurovisión entienden “las preocupaciones y los puntos de vista profundamente arraigados en torno al conflicto en curso en el Medio Oriente” y que la organización del festival mantiene consultas con los miembros de la UER para “recopilar opiniones sobre cómo gestionamos la participación y las tensiones geopolíticas”. Por el momento, la UER ha ampliado hasta mediados de diciembre el plazo para que las emisoras confirmen su participación en el festival, que se celebrará en Viena en el mes de mayo. Ernest Urtasun, ministro de Cultura, ha advertido de que se debe “lograr que Israel no participe en Eurovisión” porque los eventos culturales y deportivos no deberían “blanquear un genocidio”. “Si no lo logramos, España no debe participar”, añadió. Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, declaró este lunes en la reunión de la comisión interparlamentaria del PSOE que, “hasta que no cese la barbarie, ni Rusia ni Israel deben estar en ninguna competición internacional más”. El pasado mes de mayo, Sánchez advirtió de que, de la misma forma que Rusia no puede participar en Eurovisión a causa de la invasión de Ucrania, Israel “tampoco debería hacerlo” a causa de la ofensiva en la Franja de Gaza”. Al día siguiente del festival, el ministro israelí de la Diáspora y Lucha contra el Antisemitismo, Amichai Chikli, se refirió a los doce puntos (la máxima puntuación posible) concedidos a la canción israelí en España a través del televoto popular. “Parece que los españoles han hablado y la bofetada la hemos escuchado aquí en Jerusalén”, escribió en la red social X.