<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, consiguió ayer el apoyo de la Comisión Europea contra las restricciones comerciales impuestas por Argelia a España en represalia por el cambio de rumbo del Gobierno de Pedro Sánchez en el Sáhara Occidental.</strong></h4> “Hemos constatado el rechazo de las instituciones europeas, que también es nuestro rechazo”, declaró Albares a la prensa poco después de entrevistarse en Bruselas con <strong>el vicepresidente de la Comisión y comisario europeo para el Comercio, Valdis Dombrovskis</strong>, para abordar la doble decisión de Argelia de suspender el Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación con España y de congelar las domiciliaciones bancarias relacionadas con las operaciones de comercio exterior de productos y servicios desde y hacia España. <strong>“La medida unilateral” de Argelia “viola el Acuerdo de Asociación entre la UE y ese país y, por lo tanto, aunque va dirigida a España, afecta al mercado único, las relaciones económicas y comerciales de Argelia”</strong>, advirtió el ministro. “Seguiremos en contacto. Confiamos en que se encuentre una solución rápida para restablecer plenamente las relaciones comerciales y de inversión”, declaró, por su parte, Valdis Dombrovskis a través de su cuenta de Twitter. Poco después de la reunión entre el ministro español y el comisario europeo, <a href="https://www.eeas.europa.eu/eeas/algeria-statement-high-representationvice-president-josep-borrell-and-executive-vice-president_en" target="_blank" rel="noopener noreferrer"><strong>Dombrovskis y el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, emitieron un comunicado conjunto</strong></a> en el que advirtieron de que la decisión adoptada por Argelia de suspender el Tratado de Amistad y Buena Vecindad firmado con España en 2002 es “sumamente preocupante” y anunciaron que la Comisión está “evaluando las implicaciones de las acciones argelinas, incluyendo la instrucción dada a las instituciones financieras de detener las transacciones entre ambos países, que de entrada parecen <strong>violar el Acuerdo de Asociación UE-Argelia, en particular en el ámbito del comercio y la inversión”. </strong> <strong>“Esto supondría un trato discriminatorio para un Estado miembro de la UE y afectaría negativamente al ejercicio de los derechos de la Unión en virtud del Acuerdo”</strong>, añade el texto. “La política comercial es una competencia exclusiva de la UE, y ésta está dispuesta a oponerse a cualquier tipo de medidas coercitivas aplicadas contra un Estado miembro de la UE”, prosigue. “Sin embargo, la UE sigue favoreciendo el diálogo en primer lugar para resolver las controversias” y, por ese motivo, la Comisión se mantiene “en estrecho contacto con el Gobierno español y en contacto con las autoridades argelinas para aclarar rápidamente la situación”, añade. En un comunicado, <strong>la misión de Argelia ante la Unión Europea</strong> acusó ayer a la Comisión Europea de haber reaccionado, “sin consulta previa ni verificación alguna con el Gobierno argelino, a la suspensión por parte de Argelia de un tratado político bilateral con un socio europeo, en este caso España”, y aseguró que, entre las acciones adoptadas por Argel, no figura la congelación de las transacciones corrientes con España. Asimismo, afirmó que el suministro de gas a España no corre riesgo y que corresponde a las empresas comerciales “asumir todos sus compromisos contractuales”. Según Albares, la máxima prioridad del Gobierno en estos momentos es la “firme defensa de nuestras empresas y de los intereses de España, que son también las empresas europeas y los intereses de la Unión Europea”, así como la recuperación, “de la forma más rápida posible”, de unas “relaciones económicas y comerciales normales”. “El deseo de España es que esto se resuelva lo antes posible por el diálogo” porque “<strong>España quiere tener exactamente las mismas relaciones con Argelia que con todos sus vecinos”, prosiguió. Estas relaciones deben estar “basadas en la amistad, en el respeto mutuo y en la no injerencia”, porque “somos pueblos amigos, pero también libres y soberanos, y la UE y sus instituciones lo ven exactamente igual que nosotros”</strong>, manifestó. En cuanto a los posibles problemas para el suministro de gas, el ministro de Exteriores expresó, una vez más, su deseo de que “Argelia siga jugando el mismo papel de siempre, el de un suministrador fiable que ha dado tanta estabilidad”. <h5><strong>El PP registra la solicitud de comparecencia de Sánchez</strong></h5> <strong>Albares criticó duramente al PP, que ayer mismo registró en el Congreso una solicitud de comparecencia del presidente Pedro Sánchez para que “dé las explicaciones oportunas” sobre la crisis de Argelia</strong>, una crisis que, según la portavoz del Grupo Parlamentario Popular, Cuca Gamarra, es el resultado de “una nefasta política exterior que está llevando a cabo el presidente y que es responsabilidad suya”. “Hay momentos en los que somos Gobierno y oposición, pero hay otros momentos en los que tenemos que ser España, y todo lo que no sea eso me parece una enorme deslealtad e irresponsabilidad”, advirtió el ministro de Asuntos Exteriores. En el mismo sentido que la UE, <strong>la vicepresidenta primera, Nadia Calviño,</strong> declaró ayer que las relaciones comerciales “no son nacionales, son europeas”, y <strong>la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto</strong>, aseguró que se estaba revisando el Acuerdo de Asociación entre la Unión Europea y Argelia en materia de comercio exterior “para ver si se está vulnerando”. <strong>El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi</strong>, calificó ayer de “muy preocupante” la crisis con Argelia y defendió la “diplomacia” para “intentar ponerse ya en contacto y arreglar el tema”. Según los datos del último Boletín Estadístico de Enagás, las exportaciones de gas natural a España procedentes de Argelia cayeron un 4,7% en mayo con respecto a abril, mientras que las exportaciones a Francia se dispararon a máximos. Por su parte, <strong>la vicepresidenta segunda y dirigente de Unidas Podemos (socio minoritario en el Gobierno de coalición), Yolanda Díaz</strong>, recordó que la posición de su partido respecto al cambio de postura en el Sáhara Occidental es “conocida”, pero precisó que le “constaba” que tanto Pedro Sánchez como José Manuel Albares están “trabajando para reconducir esta situación”. Entretanto, <strong>el Ministerio del Interior descartó ayer la posibilidad de que la crisis diplomática vaya a acelerar las llegadas irregulares de inmigrantes</strong>. Al respecto, el PP también pidió la comparecencia urgente del ministro, Fernando Grande-Marlaska, en el Congreso para explicar sus medidas ante “la llegada masiva” de inmigrantes a las costas españolas este verano, que “se agravará” con la actual situación. Las autoridades policiales de Baleares, Almería y Murcia ya han advertido de que se espera “un verano caliente” en este sentido. El pasado martes, 113 inmigrantes procedentes de Argelia llegaron a las Islas Baleares a bordo de seis pateras, la mayor cifra en todo el año, según la Delegación del Gobierno. En medio de toda esta crisis con Argelia, <strong>el portavoz del Gobierno de Marruecos, Mustafá Baitas</strong>, declaró este jueves que la aplicación de la hoja de ruta establecida el pasado 7 de abril por Pedro Sánchez y el Rey Mohammed VI avanza “a un ritmo muy satisfactorio”.