<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>La compañía portuguesa Redes Energéticas Nacionais (REN) ha interrumpido “por prudencia” los intercambios comerciales de energía entre Portugal y España como consecuencia del apagón masivo que afectó este lunes a toda la península Ibérica.</strong></h4> En declaraciones a CNN Portugal, el director de REN, João Faria Conceição, explicó este martes que “las interconexiones entre los sistemas están operativas”, pero, por razones de “prudencia”, los intercambios comerciales de energía entre Portugal y España no están funcionando. Según el responsable, poco antes de las 23:30 horas de este lunes ya se había restablecido la conexión a todas sus infraestructuras repartidas por el país. “Todas nuestras subestaciones estaban conectadas y en pleno funcionamiento”, añadió. “Estamos convergiendo hacia una situación de normalidad”, pero “la parte de la distribución tarda un poco más”, prosiguió. El siguiente paso en estos momentos, precisó, es “garantizar la completa estabilización del sistema” para “pasar al normal funcionamiento de los mercados mayoristas”, que definen las centrales que suministran energía a toda la región Ibérica. “A partir de ese momento, podemos decir que el sistema volvió, tanto en términos técnicos como económicos, a un funcionamiento completamente normal”, añadió. Para ello, explicó, es necesario “gestionar el sistema eléctrico de forma separada”, como “cuestión de prudencia”, una decisión tomada conjuntamente con el Gobierno, la Dirección General de Energía, entidades oficiales españolas y homólogas en la red eléctrica española. “Las interconexiones entre los sistemas están operativas, pero no hay intercambios de energía en términos comerciales” entre Portugal y España, agregó. Al ser preguntado sobre la posibilidad de que un exceso de energías renovables en el sistema energético esté detrás del suceso del lunes, el director de REN lo considera una “idea plausible”, pero subraya que “no es la única”. “Aparentemente, y según las autoridades españolas, se ha descartado un ataque cibernético, por lo que ahora tenemos que centrarnos en lo que ha sucedido exactamente”, prosiguió. En todo caso, advirtió de que las energías renovables son “una fuente de energía segura”, con un conjunto de características –entre ellas, su volatilidad– “que deben, naturalmente, ser acomodadas” con enfoques que “mitiguen” esas mismas características.