<h6><strong>Julio García</strong></h6> <h4><strong>La UE respondió este miércoles a la entrada en vigor de los aranceles estadounidenses “injustificados” del 25% sobre el acero y el aluminio europeos con gravámenes compensatorios a los productos de EEUU por valor de hasta 26.000 millones de euros.</strong></h4> <strong>“</strong>La Comisión lamenta la decisión de EE. UU. de imponer tales aranceles, por considerarlos injustificados, perturbadores del comercio transatlántico y perjudiciales para las empresas y los consumidores, ya que a menudo se traducen en un aumento de los precios”, ha indicado en un comunicado la Comisión Europea (CE). El Ejecutivo comunitario ha explicado que su respuesta a esos aranceles estadounidenses del 25% a las importaciones de esos metales de todo el mundo ha sido “calibrada cuidadosamente” y se basa en un planteamiento en dos fases. En su red social X, la Comisión justifica esta iniciativa en defensa de los consumidores y las empresas. En una declaración, la presidente de la Comisión, Ursula von der Leyen, ha indicado que las contramedidas europeas se introducirán en dos etapas: empezarán el 1 de abril y entrarán plenamente en vigor el 13 de ese mes, aunque, mientras tanto, el Ejecutivo comunitario seguirá “abierto a la negociación”. En primer lugar, la Comisión permitirá que la suspensión de las contramedidas vigentes de 2018 y 2020 contra EEUU expiren el próximo 1 de abril. Estas contramedidas van dirigidas a una serie de productos estadounidenses que responden al perjuicio económico causado a exportaciones de acero y aluminio de la UE por valor de 8.000 millones de euros. En segundo lugar, en respuesta a los nuevos aranceles estadounidenses que afectan a más de 18.000 millones de euros de exportaciones de la UE, la Comisión propone un paquete de nuevas contramedidas sobre las exportaciones estadounidenses que está previsto que entren vigor a mediados de abril, previa consulta a los Estados miembros y las partes interesadas. Mientras tanto, la Comisión ha asegurado que la UE sigue dispuesta a colaborar con la administración estadounidense para encontrar una solución para encontrar una solución negociada, y ha recordado que las medidas anunciadas “pueden anularse en cualquier momento en caso de que se encuentre dicha solución”. “Las relaciones comerciales entre la Unión Europea y Estados Unidos son las mayores del mundo. Han aportado prosperidad y seguridad a millones de personas, y el comercio ha creado millones de puestos de trabajo a ambos lados del Atlántico”, recordó Ursula von der Leyen, quien lamentó “profundamente” la medida estadounidense. Además, destacó que que los aranceles “son impuestos, son malos para las empresas y aún peores para los consumidores”, y subrayó que «perturban las cadenas de suministro, traen incertidumbre para la economía”. “Están en juego puestos de trabajo. Los precios subirán. En Europa y en Estados Unidos”, advirtió. Así, recalcó que la UE “debe actuar para proteger a los consumidores y a las empresas”, y que las contramedidas que han decidido este miércoles son “fuertes pero proporcionadas”. <strong>“</strong>Creemos firmemente que, en un mundo plagado de incertidumbres geopolíticas y económicas, no redunda en nuestro interés común cargar nuestras economías con aranceles. Estamos dispuestos a entablar un diálogo significativo”, prosiguió Von der Leyen, que ha pedido al comisario europeo de Comercio, Maros Sefcovic, que “reanude sus conversaciones para explorar mejores soluciones con EEUU”. <h5><strong>Sefcovic</strong></h5> Por su parte, Sefcovic lamentó que «los aranceles actuales de Estados Unidos nos llevan por el camino equivocado, y las razones son múltiples. La relación comercial entre la UE y EEUU está bien equilibrada y es muy rentable para ambas partes. En el sector del acero y el aluminio, en particular, compartimos algunos de los desafíos —por ejemplo, el exceso de capacidad global impulsado por prácticas no comerciales— y la Unión Europea es parte de la solución, no del problema». «La administración estadounidense ha optado por aplicar un curso perjudicial de aranceles injustificados, lo que no nos deja otra opción que responder, y eso es exactamente lo que estamos haciendo», recalcó. A renglón seguido, el comisario de Comercio explicó que, a partir de abril, «restableceremos automáticamente nuestras medidas de reequilibrio actualmente suspendidas de 2018 y 2020, apuntando efectivamente a bienes estadounidenses por valor de 4.500 millones de euros que nos fueron exportados». «En segundo lugar, la Comisión está adoptando medidas decisivas para aprobar un paquete de contramedidas adicionales que se aplicarán a 18.000 millones de euros de exportaciones estadounidenses a la UE», añadió. Sefcovic concluyó que «el objetivo es contrarrestar el aumento del valor comercial afectado por los aranceles estadounidenses, minimizando al mismo tiempo el impacto en las empresas y consumidores europeos. Sin embargo, la disrupción causada por los aranceles es evitable si el gobierno estadounidense acepta nuestra ayuda y colabora con nosotros para alcanzar un acuerdo».