<h6><strong>Ane Barcos/Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha enviado una carta a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en la que explica “la visión española sobre el enfoque que Europa debería dar a la seguridad y la futura Unión Europea de la Defensa”, que incluye, entre otras propuestas, “la movilización de una verdadera financiación europea en el próximo ciclo presupuestario”, un sistema de deuda mancomunada similar al que se adoptó tras el COVID-19, la flexibilización de las reglas fiscales nacionales, la implicación del Banco Europeo de Inversiones (BEI) y la captación de inversiones privada.</strong></h4> En su carta, a la que han tenido acceso <em>Aquí Europa</em> y <em>The Diplomat in Spain</em>, el mandatario español recalca que "la seguridad y la defensa son bienes públicos esenciales y que solo a través de la unidad y el coraje de los Estados miembros se podrá avanzar hacia una Europa más soberana y preparada para afrontar los desafíos actuales y futuros". Además, destaca que "la guerra de agresión contra Ucrania constituye la mayor amenaza para el continente en estos momentos", razón por la cual España mantiene "un firme compromiso con la consecución de una paz justa y duradera". Sánchez propone un enfoque integral basado en la Brújula Estratégica, que refuerce "la disuasión y la defensa tanto en el flanco oriental como en el sur de Europa", abordando también cuestiones como la resiliencia industrial, la ciberseguridad y la protección de bienes estratégicos. Asimismo, aboga por "una verdadera financiación europea para la defensa", sugiriendo "la movilización de un sistema de deuda mancomunada similar al adoptado tras la COVID-19", la flexibilización de las reglas fiscales nacionales y un mayor papel del Banco Europeo de Inversiones (BEI) en la financiación del sector. También enfatiza "la necesidad de captar inversión privada para fortalecer la industria de defensa europea". En cuanto a la financiación, Sánchez propone que "el próximo Marco Financiero Plurianual (MFP) movilice al menos un 2% del PIB de la UE para reforzar las capacidades defensivas del bloque" y aumentar los fondos del Fondo Europeo para la Defensa. Además, España respalda "la creación de una línea de apoyo en el Mecanismo Europeo de Estabilidad para fortalecer la seguridad económica y explorar vehículos complementarios para la adquisición conjunta de capacidades". “Para financiar proyectos sin afectar a la financiación de otras prioridades, se debe incrementar la capacidad crediticia del BEI actualizando la definición de los materiales de doble uso”, afirma el jefe del Ejecutivo, quien defiende también la implementación de “medidas para impulsar la inversión privada” en seguridad y defensa. Por otra parte, y a fin de proteger a la UE “contra las posibles consecuencias de las nuevas amenazas a la seguridad en términos de inestabilidad financiera”, Sánchez anuncia que “España apoya la creación de una línea de apoyo en el Mecanismo Europeo de Estabilidad para respaldar la seguridad económica, siguiendo el modelo de la línea de crédito de apoyo a la crisis de la pandemia”. <strong>El plan de Von der Leyen para aumentar el gasto en defensa</strong> Por su parte, la presidenta de la Comisión Europea anunció este martes el plan ReARM Europe, una iniciativa destinada a aumentar considerablemente el gasto en defensa mediante un nuevo instrumento financiero que movilizará hasta 150.000 millones de euros en préstamos y podría alcanzar una inversión total de 800.000 millones de euros. En una carta enviada a los jefes de Estado y de Gobierno de la UE este martes en el marco de la cumbre europea extraordinaria convocada por António Costa el 6 de marzo, Von der Leyen subraya que Europa enfrenta una amenaza significativa que exige un nuevo enfoque en materia de seguridad y defensa. El plan ReARM Europe busca reforzar la capacidad de defensa de los Estados miembros y garantizar que Europa asuma el control de su propia disuasión, sin dejar de lado sus relaciones transatlánticas. Entre las principales medidas del plan se encuentra la activación de una cláusula de escape en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento para facilitar un aumento del gasto en defensa, así como la movilización de inversión pública y privada para fortalecer la competitividad de la industria europea del sector. Además, se revisarán los programas de cohesión de la UE para redirigir fondos hacia la defensa, eliminando restricciones y aumentando los incentivos financieros. El Banco Europeo de Inversiones tendrá un papel clave en la ampliación de la financiación para proyectos de defensa, asegurando una fuente adicional de recursos para las empresas del sector. Asimismo, se impulsará el acceso al capital privado con el objetivo de fomentar el crecimiento y escalabilidad de las soluciones tecnológicas en defensa. En este contexto, se promoverá la finalización de la Unión de los Mercados de Capitales para atraer más inversión hacia la economía europea. Con este conjunto de medidas, la Comisión Europea busca elevar significativamente el gasto en defensa y garantizar que Europa esté mejor preparada para afrontar los retos en materia de seguridad, consolidando su autonomía estratégica y su capacidad de respuesta ante amenazas globales.