El pasado lunes el Centro Sefarad-Israel presentó la exposición Las puertas del infierno, una visión personal del artista Santiago de la Quintana, que estará expuesta hasta el próximo 15 de abril.
A través de diferentes óleos y esculturas, el autor trata de representar los sentimientos vividos cuando se conocen los horrores del Holocausto. Sus pinturas son también reflejo de una conexión personal que proviene del hecho de que sus nietos sean judíos y del posible destino que hubieran tenido en la Europa del nazismo.
En palabras del propio autor, esta muestra responde a: “Una necesidad. Después de visitar el campo de concentración de Sachsenhausen (Berlín) en el verano del 2019 y ante el horror y el dolor sentido durante todo el recorrido del lugar, sentí la necesidad de aportar algo, aunque tan solo fuese un granito de arena, por el recuerdo de estas personas. No soy judío, pero tanto dolor nos acerca y une a todos por igual para gritar ‘nunca más’”.