<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha presentado este viernes a los embajadores africanos acreditados en España las primeras medidas realizadas en el marco de la nueva Estrategia España-África 2024-2028, el documento que guiará la política exterior española hacia el continente durante los próximos cuatro años y se encuentra en la fase de implementación.</strong></h4> La <a href="https://thediplomatinspain.com/2024/12/06/la-nueva-estrategia-espana-africa-prioriza-la-vecindad-inmediata-y-preve-mayor-presencia-diplomatica/">‘Estrategia España-África 2025-2028. Trabajando juntos a través de una relación estratégica’,</a> fue presentada a principios de diciembre por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Complejo de La Moncloa, en presencia de José Manuel Albares, el presidente de Mauritania, Mohamed Cheik El Ghazouani; el presidente de la Comisión de la Unión Africana, Moussa Faki Mahamat; el presidente de la Comisión de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO), Omar Alieu Touray; y el ministro de Economía, del Plan y de Cooperación del Gobierno de Senegal, Abdourrahmane Sarr, en representación del primer ministro, así como miembros del cuerpo diplomático africano y europeo acreditado en España, entre otros. La Estrategia tiene, como principal novedad que, a diferencia de los Planes África anteriores, cuenta con “una dimensión continental”, sin categorías de países ni socios prioritarios, aunque con especial atención a la vecindad inmediata. Durante el encuentro de este viernes, celebrado en la sede ministerial del Palacio de Viana en Madrid, Albares agradeció a los embajadores su participación durante el proceso de elaboración de esta estrategia y les invitó a seguir colaborando en la nueva fase de implementación que ya está en marcha, según informó Exteriores en una nota de prensa. Asimismo, explicó que, desde la presentación de la Estrategia, ya se han cumplido algunos de los objetivos marcados, como la puesta en marcha de varias iniciativas para promover la relación hispano-africana que consolide el diálogo y profundice el conocimiento recíproco entre ambas regiones. Otro ejemplo concreto, prosiguió, es el reciente lanzamiento de un nuevo Programa de Cooperación España-NEPAD, dotado con 20 millones de euros y centrado en la creación de oportunidades para mujeres y jóvenes con el que España quiere potenciar aún más su cooperación con la Unión Africana y otras organizaciones regionales. La Estrategia se estructura en cinco objetivos y acciones: fortalecer, conectar, proteger y convivir, que se desglosan en un centenar de líneas de actuación. Se va a llevar a cabo a través de distintos instrumentos de seguimiento, como son el Plan de Acción anual que elaborarán las embajadas o las reuniones periódicas de la Comisión Interministerial (CIMA) que se va a lazar en febrero. “Este encuentro con los embajadores africanos y las medidas que ya se están implementando son una muestra de que la Estrategia España-África no es una mera declaración de intenciones, sino un compromiso tangible con un futuro compartido”, declaró el Ministerio. “A través de los cinco objetivos, España se posiciona como un socio estratégico para África, trabajando de la mano para abordar los retos del presente y construir oportunidades para las futuras generaciones”, prosiguió. “Es además, una estrategia que beneficia a ambas regiones y que contribuye a un mundo más justo, sostenible y conectado”. La Estrategia prevé, entre otras medidas, un aumento del despliegue diplomático en la región y el refuerzo de los mecanismos de trabajo sobre África dentro del Ministerio de Asuntos Exteriores, incluida la puesta en marcha de una Subdirección General para África Occidental y el Sahel dentro de la Dirección General para África (creada el pasado 28 de noviembre por el Consejo de Ministros), de un Consejo asesor sobre África y de una Comisión Interministerial para África. En lo que respecta a la Unión Europea, la Estrategia prevé que España asuma un mayor papel en la orientación y ejecución de la política de la UE hacia África y en favor de un mayor uso de los instrumentos de la política europea en apoyo del desarrollo y de los objetivos estratégicos en el continente, acordados con los socios africanos.