Jesús González
El mensaje de Navidad de 2024 del rey Felipe VI estuvo marcado por un llamado a la serenidad como elemento clave para afrontar los desafíos políticos y sociales que atraviesa España. Desde el Palacio Real, una de las novedades del mensaje de Navidad 2024, el monarca enfatizó la importancia de un diálogo constructivo y del consenso como pilares para preservar la democracia y fortalecer la convivencia en el país.
La serenidad como demanda clamorosa
Felipe VI subrayó que, aunque la contienda política es legítima en democracia, no debe convertirse en un ruido constante que dificulte atender las necesidades reales de la ciudadanía. «La contienda política, legítima, pero en ocasiones atronadora, no debe impedir escuchar una demanda aún más clamorosa: una demanda de serenidad», afirmó, destacando la necesidad de crear un espacio para el diálogo y la cooperación entre todas las fuerzas políticas.
En este contexto, el monarca elogió la reciente reforma del artículo 49 de la Constitución, que aborda los derechos de las personas con discapacidad, como un ejemplo de lo que se puede lograr mediante el consenso. «Un pacto de convivencia se protege dialogando; ese diálogo, con altura y generosidad, debe siempre nutrir la definición de la voluntad común y la acción del Estado», señaló.
Un país con grandes retos y potencial
El Rey hizo un repaso de los principales desafíos que enfrenta España, como el acceso a la vivienda, la gestión de la inmigración y la creciente polarización en el debate público. En cada uno de estos temas, apeló a la responsabilidad compartida y a la búsqueda de soluciones conjuntas, poniendo el interés general por encima de los intereses partidistas.
También dedicó un espacio para destacar el potencial de España como nación. «España es un gran país, con un presente prometedor y un futuro lleno de oportunidades, siempre que sepamos trabajar juntos», afirmó. Asimismo, resaltó el papel de los jóvenes como motor del cambio y el progreso, instándolos a mantener su compromiso con los valores democráticos y sociales.
La solidaridad como eje transversal
El monarca inició su discurso recordando los devastadores efectos de la DANA que golpeó el este y sur de España hace dos meses. Rindió homenaje a las víctimas y destacó la respuesta solidaria de la ciudadanía, los equipos de emergencia y las instituciones. «La solidaridad que hemos visto en estos momentos difíciles debe ser una guía para enfrentar cualquier adversidad», dijo, subrayando que esta actitud ejemplifica el verdadero sentido del bien común.
Felipe VI también hizo un llamado a las administraciones públicas para que trabajen con mayor eficacia y coordinación en situaciones de emergencia, reconociendo las frustraciones y demandas legítimas de los afectados. «Es responsabilidad de todas las instituciones que la noción del bien común se refleje en cualquier discurso o decisión política», insistió.
La Unión Europea como referencia esencial
En el ámbito internacional, el Rey destacó la importancia de la Unión Europea como marco para enfrentar los retos globales y fortalecer los valores democráticos. «Europa es y debe seguir siendo un ejemplo de democracia, derechos humanos y desarrollo sostenible», afirmó, subrayando que la cooperación con los socios europeos es fundamental para abordar cuestiones como la inmigración y la transición energética.
Felipe VI resaltó que el espíritu europeo es una parte esencial de la identidad española y del legado que debe transmitirse a las generaciones futuras. «Defender con convicción y firmeza los principios de la democracia liberal y los derechos humanos es una obligación compartida», declaró.
Un mensaje de esperanza para el futuro
El discurso concluyó con un mensaje de optimismo y confianza en el potencial de España para superar los desafíos presentes y construir un futuro mejor. «La memoria del camino recorrido, la confianza en el presente y la esperanza en el futuro son parte ineludible de nuestro bien común», afirmó el monarca.
Felipe VI reiteró su compromiso y el de la Familia Real con los valores que unen a los españoles, instando a la sociedad a seguir trabajando por el bienestar colectivo. «Que la serenidad y el espíritu de solidaridad nos guíen siempre, para que juntos podamos afrontar los retos y construir un país mejor», concluyó.