<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, expresó este lunes su apoyo al impuesto global al patrimonio, propuesto por el presidente de Brasil, Luiz Inázio Lula da Silva, y anunció que España aportará 400 millones de euros al Banco Mundial para la financiación de proyectos en los países más pobres.</strong></h4> “No hay otra causa más importante ni urgente” declaró el jefe del Ejecutivo durante su intervención, a puerta cerrada, en la reunión temática sobre inclusión social, lucha contra el hambre y la pobreza de la Cumbre del G20, celebrada en Río de Janeiro y en la que se encuentra acompañado por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, y por su esposa, Begoña Gómez. Por ello, prosiguió, “hay que promover medidas como un impuesto global sobre el patrimonio de las grandes fortunas, como usted propone y defendemos juntos, presidente Lula”. Este impuesto a las grandes fortunas, cuyo propósito es financiar los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) y los objetivos climáticos, ha generado fuertes discrepancias y todo apunta a que, si aparece mencionado em la declaración final de la Cumbre, lo será de forma muy “descafeinada”, según indicaron fuentes de Moncloa. Aparte, el presidente del Gobierno aseguró que España está “dispuesta a predicar con el ejemplo en la lucha contra el hambre” y, por ello, anunció que su Gobierno entregará 400 millones de euros a la Asociación Internacional de Fomento (AIF), la entidad del Banco Mundial que presta ayuda a los países de ingreso bajo en condiciones muy favorables y que complementa la labor de la entidad crediticia original del Banco Mundial, el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF). Esta aportación fue adelantada a finales del pasado mes de octubre por el ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, en el marco de las Reuniones Anuales del Grupo Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, celebradas en Washington. Se trata de un incremento cercano al 40 % en comparación con el anterior ciclo de reposición de los recursos de la AIF y permite elevar la contribución total de España a más de 5.000 millones de euros desde la creación de la Asociación. El anuncio se produce a pocas semanas de la reunión final de la vigesimoprimera reposición de los recursos de la AIF (AIF-21), que tendrá lugar en diciembre en Seúl y que concluirá con compromisos de contribución por parte de los Estados. Según un reciente informe del Banco Mundial, los 26 países más pobres del mundo, donde vive el 40% de las personas más afectadas por la pobreza, están más endeudados que nunca desde 2006 y son cada vez más vulnerables a los desastres naturales y otras crisis. Los líderes o representantes de los 19 países miembros del G20 (Alemania, Arabia Saudí, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, EE UU, Francia, India, Indonesia, Italia, Japón, México, Reino Unido, Rusia, Sudáfrica y Turquía), más la Unión Africana y la Unión Europea, participan desde este lunes y harta el martes en la Cumbre del G20, organizado por la Presidencia brasileña. Pese a no pertenecer al G20, España participa desde 2010 en calidad de invitado permanente (es el único país con este estatus). La Cumbre reúne a todos los líderes del G20, salvo Vladimir Putin. Entre los asistentes figura, por primera vez en años, el presidente de China, Xi Jinping, quien mantendrá reuniones bilaterales. Durante la jornada de este lunes se celebran dos reuniones temáticas sobre inclusión social, lucha contra el hambre y la pobreza y sobre reforma de las instituciones de la gobernanza global (en ambas con participación de Sánchez). Salvo Lula, anfitrión del encuentro, todos los líderes intervienen a puerta cerrada. Durante la reunión sobre la reforma de la gobernanza global, Sánchez advirtió de la necesidad de disponer de un sistema multilateral fuerte con Naciones Unidas en el centro y de la urgencia de llegar a un acuerdo sobre la reforma de la Organización Mundial del Comercio (OMC). También resaltó el papel central de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en la arquitectura sanitaria mundial e informó de que España va a destinar casi 60 millones de euros a la Ronda de Inversiones de la OMS, un “incremento sustancial” del apoyo financiero para garantizar que la organización pueda desempeñar sus funciones con fiabilidad y eficacia ante los retos futuros. Sánchez también aprovechó su intervención -siempre según fuentes del Gobierno- para advertir de que los efectos de la reciente DANA en la Comunidad Valenciana demuestran que el cambio climático “mata·”, por lo que es necesario redoblar esfuerzos internacionales en esta materia. “El cambio climático mata” fue, textualmente, el mismo mensaje que trasladó el jefe del Ejecutivo la semana pasada durante la Cumbre del Clima (COP29) en Bakú, capital de Azerbaiyán. En el marco de la Cumbre, el presidente del Gobierno ha participado en el Lanzamiento de la Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza, una de las prioridades de la presidencia brasileña del G-20. Se trata de una Alianza que persigue la erradicación del hambre y la pobreza para 2030 mediante el impulso político, el conocimiento y la financiación. Según Sánchez, España ha sido uno de los primeros países en adherirse a esta iniciativa. Sánchez se encuentra en Río de Janeiro acompañado por su esposa, Begoña Gómez. Ambos fueron recibidos este mismo lunes a su llegada por Silva. La presencia de Gómez en Brasil impidió que pudiera comparecer este lunes ante el juez Juan Carlos Peinado, a pesar de estar citada, en el marco de una investigación por dos presuntos delitos de corrupción, La cita ha sido aplazada hasta el 18 de diciembre. Aparte de la recepción oficial de Lula, Sánchez mantuvo encuentros bilaterales con los primeros ministros de Vietnam (Pham Minh Chinh), Canadá (Justin Trudeau) y Australia (Anthony Albanese), y con la directora gerente de Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva.