<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>La presidenta de Kosovo, Vjosa Osmani, ha expresado este miércoles, 17 de diciembre, en Bruselas su deseo de que su país cuente con el “apoyo de todos los Estados miembros” para poder obtener “el estatus de candidato a la adhesión a la Unión Europea”. España es uno de los cinco Estados de la UE que no han reconocido todavía la independencia del antiguo territorio serbio.</strong></h4> Osmani hizo estas declaraciones tras reunirse con el presidente del Consejo Europeo, António Costa, y la alta representante de la UE para Política Exterior y de Seguridad, Kaja Kallas, en el marco de la Cumbre UE-Balcanes Occidentales, en la que los líderes europeos abordaron el estado de las candidaturas de los países aspirantes a la adhesión a la Unión Europea y en la que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, defendió una Europa que integre en el futuro a los Balcanes Occidentales “en coherencia con la política exterior y los valores europeos”, porque la ampliación representa “una ambiciosa inversión en términos de estabilidad, prosperidad, paz y seguridad”. “Esperamos que, lo antes posible, contemos con el apoyo de todos los Estados miembros para que Kosovo, por sus méritos, obtenga el estatus de candidato a la adhesión a la Unión Europea”, declaró la presidenta kosovar, citada por la web de la Presidencia, tras reunirse con Costa. “He agradecido a la alta representante su continuo apoyo a la integración europea de Kosovo”, declaró tras su encuentro con Kaja Kallas”. En declaraciones al canal Euronews, Vjosa Osmani afirmó que, “si se aplicara un criterio basado en los méritos”, su país ya tendría estatus de candidato, “pero es complicado debido a cinco países que no nos reconocen”. “Esperamos que entiendan que, si Kosovo pasa a formar parte de la Unión, no solo se beneficiaría el pueblo kosovar, sino que también sería estratégicamente importante para todo el continente”, añadió. Kosovo proclamó unilateralmente su independencia de Serbia el 17 de febrero de 2008. Más de 110 países de Naciones Unidas han reconocido ya a Kosovo como Estado, entre ellos 22 países de la Unión Europea. España, que figura entre los cinco Estados de la UE que no reconocen a Kosovo (junto a Grecia, Chipre, Eslovaquia y Rumania), ha asegurado que solo dará el reconocimiento cuando Serbia y Kosovo lleguen a un acuerdo. España ha defendido desde el primer momento esta postura para evitar las repercusiones que la aceptación de una declaración unilateral de independencia podría tener en el contencioso catalán. En el verano de 2022, Pedro Sánchez reiteró durante una gira por los Balcanes Occidentales (que incluyó Albania y Serbia) la oposición de España a la independencia unilateral de Kosovo, después de que su homólogo albanés defendiera la soberanía territorial de este territorio de mayoría albanesa, y aseguró que España “ha estado y va a estar al lado de Serbia” en relación con Kosovo. En enero de 2024, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, aseguró que el reconocimiento del pasaporte de Kosovo por parte de España sólo responde a una decisión de la UE y no implica un cambio de la postura tradicional del Gobierno español en contra de la declaración unilateral de independencia de la antigua provincia serbia.