Esta tarde a las 18.30 horas, la Embajada de Honduras presenta en la Sala Iberia de Casa América la proyección del documental Whitney, escrito y dirigido por la cineasta hondureña Katia Lara. Entrada libre hasta completar aforo de 45 localidades. Las entradas se comenzarán a distribuir una hora antes del comienzo de las proyecciones en la taquilla del Punto de Información.
Whitney Godoy, bajo su mirada de joven periodista, documenta desde dentro la “Primera Caravana de Migrantes” que tuvo lugar en 2018. Su relato se convirtió en la memoria de un viaje revelador, un testimonio de la inquebrantable esperanza del pueblo hondureño. El documental propone una mirada crítica y profundamente humana sobre uno de los temas más urgentes de nuestro tiempo.
La película tuvo su estreno mundial en el prestigioso Festival Internacional de Cine Documental DocsMX, en México.
Katia Lara es una reconocida cineasta centroamericana que desempeña roles como directora, guionista, productora y camarógrafa. Tiene también una larga trayectoria como periodista. Es cofundadora y gerente general de Terco Producciones. De sus obras destacan las aclamadas producciones galardonadas en festivales internacionales: Quién dijo miedo…Honduras de un golpe (2010) y el multipremiado cortometraje Berta soy yo (2016), así como la más reciente de todos, Whitney (2025). Su trabajo se centra en el cine de no ficción. Los temas sociales y políticos, memoria e identidad, atraviesan toda su filmografía.
La bienvenida al acto correrá a cargo de Marlon Brevé, embajador de Honduras en España, y presentarán la película Whitney Godoy, periodista y protagonista del documental y Katia Lara, directora de la película (por vídeo).
El documental cuenta concretamente cómo Whitney, estudiante de periodismo, cubre a pie la caravana de migrantes de 2018. Son miles, casi todos hondureños, dispuestos a llegar juntos hasta los Estados Unidos. Cruzando México no hay retorno, Whitney es una “indocumentada” más, pero no abandona el oficio. Su lente es testigo de un sistema fracasado. Ya no le importa poner en riesgo su graduación y su vida, es más fuerte su empatía con el sufrimiento ajeno.
