<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, compareció este miércoles ante el Congreso de los Diputados para dar cuenta del Consejo Europeo del pasado 23 de octubre. No obstante, y como era de esperar, la sesión se convirtió en un nuevo ejemplo de la fuerte polarización política interna que reina en España, agravada por la ruptura de Junts con el PSOE y el más que previsible “bloqueo” parlamentario en lo que queda de legislatura.</strong></h4> Durante su intervención inicial, el jefe del Ejecutivo destacó que, en la última cumbre de Bruselas, “por primera vez la vivienda ha entrado en la agenda europea” gracias a las presiones de la socialdemocracia, que han permitido abordar este tema. “El 60% de la desigualdad en nuestro país trae causa de la imposibilidad de muchísima gente de poder acceder a una vivienda digna”, afirmó Sánchez, quien reclamó una política pública a nivel europeo que convierta a la vivienda en el quinto pilar del Estado de bienestar y defendió la puesta en marcha de “nuevas regulaciones” que permitan a los Estados miembros actuar en esta materia. Asimismo, Sánchez insistió en la necesidad de reducir al 90% las emisiones de efecto invernadero en 2040 y defendió la transición ecológica, que es “el mejor motor que tenemos”. “El modelo español puede ser un modelo de éxito para Europa y para el mundo”, aseguró. “Europa gracias a España sigue manteniendo viva la llama contra el cambio climático”, agregó. Por ello, el presidente del Gobierno cargó contra los eurodiputados del PP por votar “con la ultraderecha” en contra de “la reducción de los gases de efecto invernadero”. Aparte, Pedro Sánchez insistió en que España se ha ofrecido a acoger una conferencia internacional de paz entre Israel y Palestina y a “seguir muy de cerca el proceso” de paz impulsado por EEUU para “asegurarnos de que el primer ministro Netanyahu y la banda terrorista Hamás cumplen lo pactado”. “La semana que viene el Gobierno transferirá a la Autoridad Palestina 46 millones de euros extraordinarios en ayuda socioeconómica a través de programas europeos”, anunció. A partir de este punto, el Consejo Europeo desapareció del resto de la sesión parlamentaria, que estuvo casi exclusivamente centrada en la creciente polarización política interna. El propio Sánchez fue quien cambió directamente de tercio cargando contra la actual oposición “absolutamente destructiva, sin aportar ni una sola propuesta, abonada al esperpento y rendida a la ultraderecha”, y lamentando, sin citar a Junts, que “ahora parece que hay otros grupos parlamentarios que se quieren abonar a ese bloqueo”. Por su parte, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, acusó a Sánchez de estar normalizando “lo inaceptable” y consiguiendo que “los españoles paguen con su dinero un Gobierno que no funciona” y que “solo ofrece mentiras, corrupción y deslealtad”. Por ello, para no seguir gobernando “en estas condiciones” y condenando al país a “una pérdida de tiempo histórica” tras la retirada de los apoyos parlamentarios, le reclamó la convocatoria de elecciones. “La responsabilidad de convocar elecciones es suya y una obligación política y moral”, advirtió. Santiago Abascal, de Vox, acusó a Sánchez, de ser un “narcisista sin escrúpulos” que está aupado en el Ejecutivo por “una flotilla de vagos y maleantes dirigida por terroristas y yihadistas”. Por su parte, la portavoz de Sumar (socio minoritario del Gobierno de coalición) en el Congreso, Verónica Martínez Barbero, pidió al Gobierno de España que actúe “ya” en materia de vivienda, defendió una democracia basada en la libertad y la igualdad social, “en la que se viva con dignidad” y a la que “están rompiendo la especulación y el rentismo”, y acusó al PP de haberse unido al “bando de los fondos buitre”. Una de las intervenciones más esperadas, por el momento político, fue la de la portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, quien denunció que el Gobierno “solo se mueve si le aprietan”. “Usted no ha cumplido, no tiene palabra y parece que solo le interesa el poder”, denunció. “Sus incumplimientos nos han hecho romper y se han quedado sin una mayoría que necesita para gobernar, dejando la legislatura bloqueada”, prosiguió. “Son unos irresponsables y las consecuencias de sus incumplimientos son de su responsabilidad, no de Junts”, concluyó.