<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El X Congreso Internacional de la Lengua Española (CILE), que se ha celebrado del 14 al 17 de octubre en la ciudad peruana de Arequipa, ha concluido este pasado viernes con una “defensa irrenunciable de los derechos y libertades” del español.</strong></h4> Esta ha sido una de las conclusiones anunciadas por el secretario general del X CILE y director académico del Instituto Cervantes, Álvaro García Santa-Cecilia, durante la celebración de la solemne sesión de clausura, que tuvo lugar en el Teatro Municipal de Arequipa y en la que detallaron los principales hitos de la celebración de este encuentro. En el acto intervinieron también Francisco Javier Pérez, secretario general de la ASALE; Eduardo F. Hopkins, secretario Académico del X CILE y presidente de la Academia Peruana de la Lengua; Carmen Noguero, secretaria general del Instituto Cervantes; Alonso Ruiz Rosas, coordinador general del X CILE; Hugo Rojas Flores, rector de la Universidad Nacional de San Agustín y Víctor Hugo Rivera Chávez, alcalde de Arequipa. “En este mundo en fuga, en el que vivimos desde hace ya unos cuantos años, parece claro que están erosionándose a gran velocidad, incluso en las democracias más avanzadas, valores y principios democráticos en los que hemos fundamentado nuestra convivencia durante décadas”, advirtió el secretario general del Congreso. García Santa-Cecilia destacó que el encuentro arequipeño puso “el foco en tres grandes desafíos” del español que requieren, por parte de la comunidad de culturas hispanoamericana, “una decidida respuesta en defensa de los derechos y libertades a los que no se quiere renunciar”: mestizaje, lenguaje claro e Inteligencia Artificial. “El primer desafío, el del mestizaje, apela a la importancia que tiene entender que el cruce de razas y la mezcla de culturas son quizá la única opción de un mundo viable”, afirmó García Santa-Cecilia, quien explicó que los participantes presentaron al español “como lengua de integración y de articulación intercultural, capaz de generar ciudadanías plurales y críticas, contrarrestando prejuicios y jerarquías idiomáticas que aún persisten”. En cuanto al lenguaje claro, los participantes hicieron una “defensa de los derechos de la ciudadanía frente al abuso de poder o la manipulación” en los que pueden incurrir las autoridades o las administraciones públicas mediante el uso «oscurantista o torticero» de la lengua. “Los ciudadanos tienen pleno derecho a que se les hable con claridad”, advirtió García Santa-Cecilia. “En un contexto marcado por la posverdad, la censura y la manipulación mediática, la claridad se erige como imperativo categórico para las instituciones”, añadió. En cuanto a la irrupción de la inteligencia artificial, los ponentes reconocieron que se trata de una herramienta que “ofrece nuevas posibilidades y riesgos”. Este congreso acogió a un total de 270 ponentes, 500 personas inscritas que asistieron como público de forma presencial, un centenar de autoridades, un centenar de invitados especiales, más de 200 periodistas acreditados y una media de 62.000 impresiones en redes sociales como Facebook e Instagram, junto a más de 6.600 visualizaciones en YouTube, donde se emitieron en directo todas las sesiones y actos culturales. En total, se han celebrado nueve sesiones plenarias, seis mesas de diálogo y 44 paneles paralelos, todo ello en las tres líneas temáticas principales que han enmarcado el contenido del congreso. En el programa cultural, por su parte, participaron más de 220 intelectuales, artistas y periodistas en un total de 46 actividades organizadas por el Instituto Cervantes, la Real Academia Española y los anfitriones de las instituciones académicas y culturales del Perú. En cuanto al impacto económico en la ciudad de Arequipa, este encuentro reunió a más de un millar de visitantes a lo largo de la semana, lo que repercutió en más de 1.500 noches de hotel contratadas, 5.400 cubiertos de restaurante y 600 pasajes aéreos.