<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El ministro de Exteriores de Israel, Gideon Saar, ha pedido a los integrantes de la Global Sumud Flotilla que no continúen con su marcha hacia la Franja de Gaza, como “también les ha pedido España”.</strong></h4> “Grecia se suma ahora también a Italia en su llamamiento a la Flotilla: ‘acepten la oferta del Patriarcado Latino de Jerusalén de entregar de forma segura ayuda destinada en solidaridad con los niños, mujeres y hombres de Gaza’”, escribió Saar en la red social X, después de que la Flotilla ya haya entrado en la zona de riesgo impuesta por Israel, algo más de un centenar de millas de la costa gazatí. “España también les ha pedido que no continúen su curso”, añadió. “Desde todas partes se escuchan llamamientos para que cese esta provocación de Hamas-Sumud. Nos sumamos a estos llamamientos y reiteramos: no es demasiado tarde. Por favor, transfieran pacíficamente cualquier ayuda que puedan recibir a través del Puerto de Chipre, el puerto deportivo de Ashkelon o cualquier otro puerto de la región hacia Gaza”, añadió. Los miembros de la Flotilla, que han denunciado acciones de hostigamiento por parte de las Fuerzas de Defensa de Israel, han asegurado que no tienen ninguna intención de interrumpir su misión de entrega de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza. El mensaje de Saar se produce después de que el Gobierno español haya recomendado “encarecidamente” a la Flotilla Global ‘Sumud’ que no se adentre en la zona de exclusión por el Ejército israelí, porque “pondría en riesgo severo su propia seguridad”, y haya advertido de que el buque ‘Furor’ de la Armada enviado por España para asistir a la misión humanitaria no podrá acceder a esa zona porque “pondría en riesgo la integridad física de su tripulación y de la propia Flotilla”. Estas palabras han sido duramente criticadas por Sumar, socio minoritario en el Gobierno de coalición de Pedro Sánchez, que ha advertido a través de las redes sociales de que “la Flotilla de la Libertad cumple la legalidad internacional y debe completar su misión humanitaria en Gaza” y, por tanto, “cualquier intento de impedirlo sería ilegal, por eso España y la UE tienen la obligación de protegerla”. Por su parte, el gabinete de prensa de la Flotilla ha criticado duramente estas recomendaciones del Gobierno. “Mientras la Armada israelí anuncia que impondrá una zona de exclusión de 120 millas náuticas, una ocupación de facto del Mediterráneo oriental, el Gobierno se limita a pedir a la tripulación de la Global Sumud Flotilla que abandone su misión y renuncia a ofrecerles la protección necesaria para llegar a Gaza a través de una fragata de la que no sabemos a qué distancia real está de la Flotilla”. Al respecto, la ministra de Defensa, Margarita Robles, pidió este miércoles a los miembros de la Flotilla que valoren el riesgo que asumen al entrar en la zona de exclusión marcada por Israel. “Es su responsabilidad, el riesgo que asumen personalmente, el riesgo en el que pueden poner a otras personas”, declaró a la prensa durante un acto en Barcelona. Asimismo, insistió en que el buque español ‘Furor’ “va a llegar hasta la zona de exclusión y se quedará un poco antes de llegar” a ella, y no entrará en esta zona salvo “en caso de absoluta necesidad, si hubiera labores de salvamento”. Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha declarado este miércoles desde Copenhague que “la Flotilla no representa una amenaza para Israel” y, por tanto, “Israel tampoco debe representar una amenaza para la Flotilla”.