<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>Las relaciones entre diplomacia e hispanistas protagonizaron este martes la segunda jornada de la Reunión Anual del Instituto Cervantes, que se celebra esta semana en la Universidad de La Laguna.</strong></h4> Antonio Niño, catedrático de Historia Contemporánea en la Universidad Complutense de Madrid, impartió una conferencia en el Edificio Central de la universidad titulada ‘La diplomacia cultural española y el hispanismo internacional’, en la que repasó la evolución del hispanismo desde los años veinte del siglo XX, cuando la administración española intentó promoverlo mediante la creación de servicios culturales y una red de lectorados, cátedras de Lengua y Literatura españolas e institutos hispánicos. El objetivo de aquellos dirigentes españoles, según el catedrático, era “combatir lo que se consideraba la secular hispanofobia” que dominaba en el extranjero y mejorar una imagen en el exterior que se había visto muy debilitada, en especial tras el llamado “Desastre del 98”. En esos años, tanto durante la II República (con nombres como Dámaso Alonso, Jorge Guillén o Luis Cernuda) como durante el franquismo, el objetivo de la diplomacia española fue conseguir que los hispanistas fueran unos “aliados naturales” en la promoción de la imagen de España en el exterior, prosiguió. Según Niño, en la actualidad, los hispanistas “siguen jugando un rol importante, aunque hayan cambiado las reglas del juego”. “Cada vez que hay un acontecimiento importante en España, como el 15-M o el ‘procés’, en los medios de comunicación internacionales se apela a los hispanistas para que expliquen a sus audiencias lo que está pasando en el país”, explicó. Por ese motivo, el catedrático de la Complutense reclamó el diseño de políticas adecuadas y sostenidas en el tiempo, junto con la creación de un “relato apropiado”, como clave del éxito de estas políticas culturales. “Esto tiene un valor extraordinario para la imagen de España en el exterior, como papel de analistas y creadores de opinión, y por eso hay que preguntarse qué inversión merecen para facilitar su trabajo”, añadió.