<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>España ha asumido el mando de la Fuerza de Reacción Marítima Aliada de la OTAN, cuya misión es contribuir a la vigilancia marítima en tiempos de paz y trabajar en tareas de disuasión y defensa contra las principales amenazas en el panorama geopolítico actual.</strong></h4> El mando, que fue asumido el pasado 1 de julio y concluirá dentro de doce meses, se ejercerá desde el Cuartel General Marítimo de Alta Disponibilidad, ubicado en el buque de asalto anfibio ‘Castilla’, en la Base Naval de Rota. Según informó este pasado miércoles el Ministerio de Defensa, el Estado Mayor del Cuartel General Marítimo, con 186 personas a bordo del buque, se trata de una unidad de élite que solo tienen siete países de la Alianza y se encuentra preparado para responder, en un plazo máximo de cinco días, a cualquier requerimiento de la Alianza en materia de información, seguimiento y operaciones y para servir de apoyo a los mandos regionales de OTAN en Norfolk, Brunssum y Nápoles. La ministra de Defensa, Margarita Robles, efectuó el miércoles un visita al buque para conocer el trabajo que realiza el Estado Mayor durante las 24 horas al día para poder ejercer su labor de mando. “Cuando desde la Alianza nos felicitan por nuestro trabajo, esa es la mejor señal de que España es un gran país, con unas Fuerzas Armadas que ostentan una gran cualificación y, sobre todo, que tienen una gran calidad humana que deja huella”, declaró Robles. Para poder asumir esta responsabilidad, el Cuartel General de Alta Disponibilidad ha llevado a cabo un intenso proceso de certificación durante más de un año, en el que ha participado en tres ejercicios de la OTAN y ha alcanzado los estándares de rendimiento y requisitos operativos (‘mission capable’).