<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El Gobierno de España presentará en la IV Conferencia Internacional para Financiación al Desarrollo, que se celebrará en Sevilla del 30 de junio al 3 de julio, dos iniciativas para la creación de un Hub de Canjes de Deuda y de una Alianza por las Cláusulas de Suspensión de Deuda</strong> <strong>“para ayudar a los países vulnerables a avanzar hacia un desarrollo más sostenible”.</strong></h4> Así lo anunció esta semana el ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, durante una jornada organizada en Casa de América por el Ministerio junto al Climate Emergency Collaboration Group, la Children's Investment Fund Foundation y el Sustainable Sovereign Debt Hub, como parte de la serie de actos previos a la IV Conferencia Internacional para Financiación al Desarrollo de Sevilla. “La acción multilateral y nuestras instituciones internacionales están bajo presión”, afirmó Cuerpo durante la inauguración de la jornada. “Hoy, más que nunca, necesitamos una revolución en la financiación para el desarrollo, la arquitectura financiera internacional debe adaptarse o corre el riesgo de quedarse corta ante este momento·, advirtió. “Para ello, Sevilla llega en el momento adecuado y ofrece una oportunidad sin precedentes para cambiar esta tendencia, transformar el discurso en acción y contribuir a un marco financiero global renovado que realmente funcione”, añadió. Según datos de Naciones Unidas, recogidos por el ministro, 29 billones de dólares en deuda soberana recaen actualmente sobre los países en desarrollo y 48 países que albergan a 3.300 millones de personas ya gastan más en intereses que en educación o salud. “No son solo números: son escuelas que no se están construyendo, vacunas que no se están entregando, oportunidades de construir un mundo mejor que se están perdiendo”, advirtió. Las dos iniciativas anunciadas, un Hub de Canjes de Deuda y una Alianza por las Cláusulas de Suspensión de Deuda, se enmarcan en la Plataforma para la Acción de Sevilla (SPA, en sus siglas en inglés), que, según el Gobierno, “supone una novedad con respeto a anteriores conferencias y proporcionará un marco para presentar iniciativas de financiación para el desarrollo que conlleven seguimiento en el tiempo”. El Hub de Canjes de Deuda (Debt Swap Hub), en colaboración con el Banco Mundial, buscará mejorar el diseño e implementación de los canjes de deuda por desarrollo facilitando el intercambio de conocimientos, la estandarización y el aprendizaje de mejores prácticas. España tiene una amplia experiencia en canjes bilaterales de deuda, con más de 1.600 millones de euros en programas de conversión en 28 países hasta la fecha. “El objetivo es aprovechar el gran potencial que tienen estos canjes, no solo para aliviar cargas de deuda, sino sobre todo para ayudar a los países vulnerables a avanzar hacia un desarrollo más sostenible”, aseguró el Ejecutivo. La segunda propuesta es la creación de una Alianza por las Cláusulas de Suspensión de Deuda (Debt Pause Clause Alliance), con la que se pretende promover una coalición de países e instituciones que se comprometa a promover el apoyo de acreedores públicos y privados a la aplicación de cláusulas de suspensión de deuda, dando espacio fiscal a los países vulnerables en momentos de crisis. España ya cuenta con experiencia en este ámbito. En 2024, el Gobierno aprobó una nueva política por la cual todos los nuevos préstamos soberanos y reestructuraciones para países de ingresos bajos y medianos-bajos incluirán cláusulas de suspensión de deuda. En mayo de ese año, se firmó el primer préstamo con cláusula de suspensión de deuda —con Ruanda—, allanando el camino para una adopción más amplia. España invitará en Sevilla al mayor número posible de actores —gobiernos, bancos multilaterales, inversores privados— a unirse a la Alianza, para avanzar en una adopción masiva de este tipo de cláusulas por parte de agentes tanto públicos como privados. El objetivo es que se comprometan a incorporarlas en sus contratos de préstamo y a trabajar juntos en una segunda etapa para estandarizarlas, facilitando su adopción tanto por deudores como acreedores.