<h6><strong>Ane Barcos</strong></h6> <h4><strong>España y Portugal han solicitado a la Comisión Europea un compromiso político y financiero firme para acelerar los proyectos de interconexión eléctrica con el resto del continente, tras el apagón masivo que afectó a la Península Ibérica el pasado 28 de abril.</strong></h4> Madrid y Lisboa trasladaron este miércoles al Ejecutivo comunitario la urgencia de completar las interconexiones eléctricas de la Península Ibérica con el resto de Europa. La petición fue formalizada en una carta conjunta firmada por la vicepresidenta tercera del Gobierno español y ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, y por la ministra portuguesa de Medio Ambiente y Energía, Maria da Graça Carvalho. Esta última entregó personalmente la misiva al comisario europeo de Energía, Dan Jørgensen, durante un encuentro celebrado en Bruselas. En la carta, los gobiernos ibéricos subrayan que el reciente apagón puso de manifiesto la importancia de una mayor interconectividad dentro del sistema eléctrico europeo, especialmente en situaciones críticas. Además, denuncian que Francia ha bloqueado avances clave en nuevos proyectos de interconexión, considerados esenciales para garantizar la seguridad del suministro y evitar futuras interrupciones. Como solución, proponen la celebración de una reunión ministerial antes de que finalice el año, con la participación de la Comisión Europea y el Gobierno francés, con el objetivo de acordar una hoja de ruta con hitos concretos para alcanzar los objetivos de interconexión establecidos por la UE para 2030 y 2040. Actualmente, la capacidad de interconexión eléctrica de la Península Ibérica apenas alcanza el 2,8 %, muy por debajo del objetivo europeo del 15 % fijado para 2030. Según España y Portugal, este déficit encarece los precios de la electricidad y debilita la estabilidad de sus redes energéticas. Aunque ya se están reforzando infraestructuras existentes y se está desarrollando una nueva línea submarina a través del Golfo de Vizcaya, que se prevé operativa en 2028, los dos países reclaman un compromiso político y financiero más sólido por parte de la Unión Europea. Por su parte, el comisario Jørgensen valoró positivamente el encuentro, destacando que fue una buena oportunidad para recibir información actualizada sobre las causas del apagón. Asimismo, expresó la solidaridad de la Comisión Europea con los países afectados y reiteró su apoyo a las investigaciones en curso. Jørgensen también subrayó la importancia de avanzar en la mejora de las interconexiones energéticas y en la descarbonización de la Unión Energética Europea.