The Diplomat
El Rey Felipe VI y el presidente de República Dominicana, Luis Abinader, clausuraron este martes la XXIX edición del World Law Congress (Congreso Mundial del Derecho), celebrada en Santo Domingo y en la que defendió la vigencia del vínculo transatlántico, “ahora que tanto se pone en tela de juicio”.
El World Law Congress es un evento organizado por la World Law Foundation en el que convergen conferencias de diferentes organizaciones. Los Congresos Mundiales de Derecho reúnen a más de 2.000 líderes mundiales (jefes de Estado, presidentes de tribunales supremos, magistrados, jueces, académicos, notarios, registradores, abogados, estudiantes de derecho y juristas en general).para debatir temas de actualidad relacionados con el mundo jurídico debe abordar. En el acto se entregó el premio World Peace & Liberty Award a Sonia Sotomayor, jueza asociada de la Corte Suprema de Estados Unidos.
Durante su, intervención, el Rey afirmó que el Estado de derecho “protege y potencia a la persona, es la garantía del respeto de su dignidad y de su aspiración a una convivencia democrática” y advirtió de que, “frente a las promesas de eficacia o las soluciones simples para problemas complejos”, ningún modelo de organización política “puede ser más sólido que aquel donde impera la igualdad ante la ley; donde se respetan los derechos individuales, donde cada voz, por diferente o incluso débil que parezca, es escuchada y respetada”.
Asimismo, destacó la “hondura intelectual, su comprensión de los problemas jurídicos y sociales de nuestro tiempo” de Sonia Sotomayor, “una de las juristas más escuchadas y respetadas en un país como Estados Unidos; un país que conozco bastante y al que quiero y admiro profundamente, un país que ha sabido, en su historia, hacer fructificar tantas ideas nacidas en Europa y sembrar tantas otras que han acabado dando fruto también en el continente europeo y más allá”.
“Ahora que tanto se discute acerca del vínculo transatlántico, poniéndose a veces en tela de juicio su vigencia o su futuro, creo que conviene recordar que ese vínculo no es tan solo una relación entre gobiernos y administraciones públicas, sino que se funda sobre un diálogo permanente, siempre inacabado, mutuamente enriquecedor, entre empresas, fundaciones, universidades, representantes de la sociedad civil y personas que ostentan posiciones de liderazgo en ambas orillas”, prosiguió el Monarca. “El diálogo transatlántico lo hacemos todos, en todos los sectores, y es parte de nuestra identidad, en Europa y en América”, agregó.