<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>Los Reyes asistieron este sábado a la Misa Exequial por el Papa Francisco, en la Basílica de San Pedro, en Ciudad del Vaticano, acompañados por la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero; la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz; el ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños; y el líder del PP, Alberto Núñez Feojóo.</strong></h4> A su llegada al Aeropuerto de Ciampino, Don Felipe y Doña Letizia fueron recibidos por el secretario general del Ministerio de Asuntos Exteriores de la República Italiana, Riccardo Guariglia; el embajador de España en Italia, Miguel Ángel Fernández-Palacios; y la embajadora de España ante la Santa Sede, María Isabel Celaá, entre otras autoridades. A continuación, se trasladaron a la Basílica de San Pedro donde les esperaban el jefe de Protocolo de la Santa Sede, Javier Domingo Fernández y el cardenal secretario de Estado de la Santa Sede, Pietro Parolin. La Ceremonia de Exequias del Papa Francisco, fue celebrada según el Ordo Exsequiarum Romani Pontificis. La liturgia exequial fue presidida por el cardenal Giovanni Battista Re, decano del Colegio Cardenalicio. Durante la homilía, el cardenal Re repasó los momentos decisivos de la vida del fallecido Pontífice: su elección como pontífice el 13 de marzo de 2013, su paso por la Compañía de Jesús, y sus más de dos décadas de servicio pastoral en Buenos Aires. También destacó la elección de su nombre, Francisco, como una decisión “programática y de estilo”, inspirada en san Francisco de Asís y que marcaría el rumbo de su Pontificado. Al final de la celebración eucarística tuvo lugar la Ultima Commendatio y la Valedictio. A continuación, el féretro del papa fue trasladado a la Basílica de San Pedro y de allí a la Basílica de Santa María la Mayor para su inhumación. El Papa Francisco, que inició su pontificado el 13 marzo de 2013, falleció este lunes, 21 de abril, a los 88 años de edad, en Roma. La ausencia más llamativa en la delegación española fue la del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien fue el único líder de cualquiera de los países más importantes de la UE que no acudió al funeral del Papa. No han transcendido los motivos de su ausencia. En la rueda de prensa posterior al último Consejo de Ministros, Sánchez declaró que el Papa Francisco fue “un amigo de España y un referente moral y espiritual para millones de personas, un líder que abogó por la lucha contra la pobreza, por una mirada humanista del fenómeno de la migración, por la mitigación y la adaptación al cambio climático o contra la intolerancia cuando más falta hacía”. En 2005, los Reyes Juan Carlos y Sofía, el entonces presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el entonces líder del PP, Mariano Rajoy, acudieron al funeral del Papa Juan Pablo II.