Eduardo González
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, afirmó este miércoles ante el pleno del Congreso que la propuesta del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de desalojar a la población palestina de la Franja de Gaza es “inadmisible”.
“La propuesta de desplazar a la población de Gaza de su tierra no solo es inadmisible desde un punto de vista moral”, sino que es “una violación de los principios más elementales del Derecho Internacional”, manifestó el ministro en respuesta a una petición de los grupos EH Bildu y Republicano para exponer la posición del Gobierno “ante la voluntad mostrada por EEUU e Israel de iniciar un plan de limpieza étnica en Gaza”.
Según el ministro, la aplicación del plan de Trump sería “un error geopolítico que sólo traería más sufrimiento a palestinos y a israelíes y además imposibilitaría totalmente un futuro en paz, invalidando la solución de dos Estados”.
Durante una rueda de prensa conjunta con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, Trump anunció el pasado 4 de febrero la intención de Estados Unidos de “tomar el control” de la Franja de Gaza y de hacerse cargo de la reconstrucción del territorio para convertirlo en una especie de resort turístico, bajo autoridad estadounidense (la “Riviera de Oriente Medio”), en el que residirá “gente del mundo”. Ello implicará, añadió, el derribo de sus actuales edificios y el desplazamiento por la fuerza, y de manera “permanente”, de sus 2,3 millones de habitantes palestinos.
Por otra parte, Albares condenó “la terrible violencia que ha asolado” el oeste de Siria “el pasado fin de semana”, que ha causado la muerte de cientos de civiles, y exigió que “los responsables respondan ante la justicia” para que no queden “impunes”.
Según el ministro, el Gobierno español apoya “un proceso político inclusivo, que incluya a las mujeres, que incluya a todas las minorías religiosas, étnicas y pacífico”, tal como él mismo le trasladó el pasado mes de enero en Damasco pal residente de transición de Siria y líder del grupo yihadista Hayat Tahrir al Sham (HTS), Ahmad al Shara, durante el encuentro que mantuvo el pasado enero en su visita a Damasco. Aparte, añadió, las minorías étnicas y religiosas y las mujeres “cuentan con el apoyo de España para un futuro democrático en el que todos los sirios y todas las sirias tengan los mismos derechos reconocidos en la Constitución”.
Las fuerzas de seguridad de las nuevas autoridades de Damasco lanzaron el pasado jueves una operación armada contra grupos leales a Al Assad en las provincias de Latakia y Tartús, en el oeste de Siria, en respuesta a una emboscada y a varios ataques de los insurgentes contra el Ejército. Se trata del mayor estallido de violencia desde la caída del anterior régimen el pasado mes de diciembre, tras una ofensiva conjunta de rebeldes y yihadistas.
Según el prestigioso Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, durante la ofensiva -lanzada por las fuerzas gubernamentales y grupos armados aliados- fueron ejecutados “a sangre fría” más de 970 civiles pertenecientes a la minoría alauita, la rama del islam chií de la familia Al Assad y cuyo núcleo duro se encuentra, precisamente, en estas dos provincias. Ahmad al Shara anunció el domingo la creación de una comisión para investigar las “violaciones” cometidas durante estas operaciones y para “preservar la paz civil”.