El Museo Nacional Thyssen-Bornemisza de Madrid presenta hasta el próximo 8 de junio la exposición Proust y las artes, sobre la importancia que tuvo el arte en la obra de uno de los escritores más influyentes del siglo XX, Marcel Proust (Auteuil, 1871-París, 1922), reconocido no solo en la literatura, sino también en la filosofía y la teoría del arte.
Las ideas estéticas que Proust desarrolla en su obra, los ambientes artísticos, monumentales y paisajísticos que le rodearon y que recrea en sus libros, así como los artistas contemporáneos o del pasado que le sirvieron de estímulo son algunos de los aspectos que articulan el recorrido de la muestra. El objetivo es resaltar ese vínculo y la interrelación entre el arte y su figura, su vida y su trabajo.
Para entender a Proust es importante conocer el París en el que vivió, es decir, la cosmopolita y rica capital de la Tercera República, su gran transformación tras las reformas urbanísticas del barón Haussmann, con la aparición de la electricidad, los coches, los espectáculos, los restaurantes y los cafés. Proust era un apasionado no solo de las artes, sino de esa modernidad tan en auge a fines del siglo XIX. La imagen de lo moderno que crearon los pintores impresionistas, a través de su representación de las calles y otros ambientes de París, está en la base de la estética proustiana: todo ello marcaría su biografía y también sus escritos.
Además de pinturas de Rembrandt, Johannes Vermeer, Anton van Dyck, Jean-Antoine Watteau, Joseph M. W. Turner, Henri Fantin-Latour, James McNeill Whistler, Édouard Manet, Claude Monet o Pierre-Auguste Renoir, entre otros, una escultura de Émile Antoine Bourdelle y los citados diseños de Fortuny y de otros creadores de la época, la exposición incluye una selección de libros de Proust procedentes de la Bibliothèque nationale de France y de la Biblioteca del Ateneo de Madrid, y otros préstamos del Musée du Louvre, el Musée d’Orsay y el Carnavalet de París, la Mauritshuis de La Haya, el Rijksmuseum de Ámsterdam, el Städel Museum de Fráncfort y la National Gallery of Art de Washington.