Fahrettin Altun
Director de Comunicaciones de la República de Turquía
La época en que vivimos no sólo ofrece nuevas oportunidades a la humanidad, sino que también conlleva serios desafíos. En una época en la que es difícil seguir el ritmo de la velocidad de producción y circulación de la información, el ecosistema de la comunicación está pasando por un proceso de transformación radical. Sin embargo, este proceso de transformación no sólo incluye avances positivos, sino también retos morales, culturales y humanitarios.
La inteligencia artificial y los algoritmos, que se han convertido en un elemento de la vida cotidiana en este flamante y desafiante periodo en el que la tecnología evoluciona rápidamente, ya no son sólo herramientas, sino que se han convertido en actores que redefinen el equilibrio de poder. En el mundo actual, donde la línea que separa la verdad de la mentira es cada día más difusa y la humanidad se enfrenta a incertidumbres que también puede llamarse «crisis de la verdad», nos enfrentamos a grandes retos y sabemos que la única manera de superar estas problemas es desarrollar estrategias de comunicación eficaces.
Nuestra prioridad debe ser analizar y gestionar eficazmente las oportunidades y amenazas del ecosistema de la comunicación transformado por la tecnología en beneficio de la sociedad. Los avances están cambiando los hábitos de las sociedades en el ámbito de la comunicación, y los medios digitales figuran como una parte importante de nuestras vidas. El aspecto más llamativo de este cambio es el impacto de la inteligencia artificial en los procesos de comunicación.
Las herramientas de inteligencia artificial están transformando rápidamente nuestro mundo y todos los sectores. Hoy en día, la inteligencia artificial se presenta ante nosotros como una fuerza que cambiará las reglas de la comunicación estratégica. Las posibilidades que ofrece en ámbitos como el análisis de datos, la producción de contenidos y la gestión de crisis proporcionan una rapidez y eficacia que ni siquiera se podían imaginar hace unos años. Ideas que hace poco tiempo sólo podían imaginarse en las películas de ciencia ficción son ahora fácilmente accesibles por todos. Lamentablemente, este progreso positivo de la tecnología tiene el potencial de convertirse en un arma digital cuando no se utiliza con los fines apropiados.
La inteligencia artificial, capaz de producir deep-fakes, hace indistinguibles los contenidos originales de los falsos, daña la confianza de las sociedades y ahonda la crisis de la verdad. De este modo, aumentan enormemente las consecuencias destructivas de la desinformación, la manipulación y las violaciones éticas. En un mundo controlado por algoritmos, el confinamiento de los individuos en cámaras de eco sólo fomenta la polarización social y la manipulación sustituye a la verdad. Esta situación revela una vez más que la inteligencia artificial debe gestionarse con principios éticos. El uso de la inteligencia artificial en el ámbito digital genera numerosas cuestiones como la responsabilidad, la transparencia y la ética.
Durante las recientes tragedias de Gaza, fuimos testigos de cómo se utilizó la desinformación asistida por inteligencia artificial para engañar a la opinión pública internacional. La desinformación en las redes sociales se difunde rápidamente mediante algoritmos, mientras se bloquea el acceso a la información veraz. En consecuencia, a la opinión pública le resulta difícil recibir información real sobre la evolución de la situación y las violaciones de los derechos humanos.
No se pueden negar los grandes beneficios de las oportunidades tecnológicas y digitales para la humanidad. Del mismo modo que no se puede negar que la existencia de quienes utilizan estas capacidades con fines malintencionados supone una amenaza para la seguridad y la estabilidad mundiales. Ante tan devastadores efectos, Turquía se esfuerza por evitar la desinformación, defender la verdad y garantizar que la comunidad internacional tenga acceso a información veraz a través de sus mecanismos de comunicación estratégica. La concienciación sobre las amenazas digitales y el aumento de la alfabetización mediática son algunas de nuestras prioridades en la lucha contra los diversos riesgos actuales. Cada vez se reconoce más la importancia de la cooperación mundial para gestionar la profunda transformación del espacio digital. Turquía continúa apoyando la cooperación internacional en la lucha contra la verdad.
En el marco de la Visión del Siglo de Turquía de nuestro presidente, Sr. Recep Tayyip Erdoğan, Turquía está adoptando una postura estratégica en esta era de transformación. Hemos adoptado una forma de enfoque de la comunicación basada en poner la tecnología al servicio de la humanidad, dar prioridad al beneficio social y situar la verdad en el centro. En esta nueva era, consideramos que la comunicación estratégica es la clave para gestionar la incertidumbre y generar confianza. Como Turquía, desempeñamos un papel activo en este ámbito a escala nacional e internacional. Nuestros esfuerzos en la lucha contra la desinformación, encabezados por la Dirección de Comunicación de la Presidencia, se han comprometido desde hace tiempo a abordar la crisis de la verdad y a desarrollar soluciones eficaces en este contexto. Consideramos que la comunicación de crisis es una de las ámbitos de aplicación más importantes de los procesos de comunicación estratégica apoyados por la inteligencia artificial. Acceder rápidamente a información precisa e informar eficazmente a la opinión pública desempeña un papel vital en tiempos de crisis.
En este periodo en el que sentimos de cerca los vientos de transformación de la era digital, el «STRATCOM: Foro Internacional de Comunicación Estratégica» es una plataforma pionera en la que se debatirán en profundidad todas estas oportunidades y riesgos a escala mundial. El Foro, que reúne a representantes del sector público, los medios de comunicación, el mundo académico, la sociedad civil y el sector privado de todo el mundo, es un centro donde se mezclan las ideas que configuran el futuro del ecosistema de la comunicación estratégica. Sin embargo, no es correcto considerar STRATCOM sólo como un Foro.
«STRATCOM: Foro Internacional de Comunicación Estratégica» es al mismo tiempo un llamamiento mundial para construir una voluntad común frente a los retos de la era digital y la crisis de la verdad. Vemos la importancia de esta llamada mundial ya que estas revoluciones en inteligencia artificial y comunicación estratégica conllevan grandes responsabilidades. Somos conscientes de que, por el futuro común de la humanidad, debemos actuar con un entendimiento que no renuncie los principios de verdad, conciencia y justicia. Guiada por este entendimiento, Turquía seguirá siendo un modelo no sólo en su región, sino también a escala mundial.
