Ane Barcos
El Parlamento Europeo aprobó este miércoles la Comisión Von der Leyen II con 370 votos a favor, 282 en contra y 36 abstenciones.
Tras un proceso de audiencias marcado por vetos cruzados impulsados por intereses partidistas, la Eurocámara dio este miércoles su respaldo, en una ajustada votación, a la nueva Comisión de Ursula von der Leyen. Este nuevo Ejecutivo contará con los 26 comisarios inicialmente designados, un escenario que no se repetía desde hace dos décadas.
La exvicepresidenta tercera del Gobierno español Teresa Ribera ejercerá los cargos de vicepresidenta ejecutiva para la Transición Limpia, Justa y Competitiva y comisaria de Competencia en la nueva Comisión Europea de Ursula von der Leyen, después de que, la semana pasada, los líderes de los tres principales grupos parlamentario, Manfred Weber (PPE), Iratxe García (S&D) y Valérie Hayer (RE), llegaran a un acuerdo que permitirá que el nuevo Ejecutivo comunitario pueda entrar en vigor el próximo 1 de diciembre.
Para alcanzar este acuerdo, el PPE se comprometió a levantar el veto a Teresa Ribera, impulsado la pasada anterior por el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, en protesta por su gestión de la crisis de la DANA. En contrapartida, los socialdemócratas hicieron lo mismo con el ultraderechista Raffaele Fitto, el candidato de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni.
La Comisión Von der Leyen II echará a andar este domingo, 1 de diciembre de 2024, tras conseguir este martes el respaldo del Parlamento Europeo con 370 votos a favor, 282 en contra y 36 abstenciones.
El debate previo a la votación mantuvo las dinámicas establecidas por los grupos políticos durante las audiencias de confirmación de los candidatos. Destacó la negativa de la delegación española del Partido Popular Europeo, que intentó presionar a su grupo para tumbar la candidatura de la socialista Teresa Ribera, cuestionando su gestión de la DANA. Este bloqueo desencadenó un efecto dominó que paralizó la aprobación de otras candidaturas clave, incluidas las vicepresidencias.
El estancamiento se resolvió gracias a un acuerdo entre la tradicional mayoría proeuropea del Parlamento, formada por populares, socialistas y liberales. El pacto incluyó el respaldo del PPE a Ribera a cambio del apoyo socialista a los candidatos del gobierno italiano de Giorgia Meloni, Raffaele Fitto, y del húngaro Viktor Orbán, Viktor Várhelyi.
No obstante, el Partido Popular español votó en contra de la Comisión, como muestra de su rechazo a Ribera, a quien acusaron de llegar a Europa con “demasiadas cuentas pendientes” tras su gestión en España.
Entre los 282 votos en contra, se incluyó también la extrema derecha, en especial el grupo Patriotas por Europa, que cargó duramente contra la Comisión saliente y la entrante. Su líder, Jordan Bardella, acusó a Von der Leyen de aliarse con la izquierda, asegurando que estas políticas llevarán «a Europa al abismo». El eurodiputado español de Vox, Jorge Buxadé, lamentó que no se hubiera rechazado antes a Ribera y calificó al nuevo Ejecutivo como «la comisión del lodo», atribuyendo al Parlamento la responsabilidad de esta situación.
Desde el otro extremo del hemiciclo también surgieron críticas. Tanto Los Verdes/ALE como La Izquierda denunciaron la presencia de figuras vinculadas a la extrema derecha, como Fitto, y expresaron preocupación por las políticas de austeridad, migración y alianzas con partidos ultraconservadores.
El grupo de La Izquierda, liderado por Manon Aubry, se opuso contundentemente a la nueva Comisión, considerándola un claro retroceso para los valores progresistas y proeuropeos.
Menos críticos se mostraron los socialdemócratas y liberales, que ofrecieron un apoyo mayoritario al nuevo equipo comunitario. Sin embargo, la líder del grupo S&D, Iratxe García, recordó que el respaldo no es un «cheque en blanco» y destacó la importancia de mantener el compromiso con la justicia social y la lucha contra el cambio climático. La delegación española valoró el pacto alcanzado entre las fuerzas proeuropeas.
Renew Europe, por su parte, que también respaldó el nuevo Colegio de Comisarios, celebró que algunas de sus demandas, como limitar las competencias en derechos reproductivos del comisario húngaro Várhelyi, fueran atendidas. Su líder, Valérie Hayer, abogó por la unidad, subrayando que la votación no debía interpretarse como un combate político.
Aunque la aprobación de la Comisión supone una victoria para Von der Leyen, está marcada por profundas divisiones internas que evidencian las tensiones políticas que podrían definir la legislatura.
Sánchez y Albares felicitan a Ribera
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, han felicitado este miércoles a la hasta ahora vicepresidenta tercera del Gobierno por la confirmación de su nombramiento para la nueva Comisión Europea de Ursula von der Leyen.
“Ya tenemos la nueva Comisión Europea en marcha”, declaró Sánchez a través de las redes sociales. “Gana Europa. Gana España”, prosiguió. “Enhorabuena, Teresa Ribera, vicepresidenta primera de la Comisión Europea con una cartera impresionante y sin precedentes: poder directo sobre la política de competencia y coordinación en política energética y climática”, añadió. “Congratulations, Ursula von der Leyen”, concluyó,
El nombramiento de la nueva Comisión fue tratado este miércoles en el Congreso de los Diputados, durante la sesión de control al Gobierno, en la que la diputada Macarena Montesinos, del PP, afirmó que, “sólo por la responsabilidad de Ribera y su nefasta gestión” en la crisis de la DANA, “no merece formar parte de la Comisión Europea”. Asimismo, criticó que el Gobierno haya acabado dando su voto a los candidatos de la extrema derecha en el nuevo Ejecutivo de Ursula von der Leyen después de haber estado “abominando” de ellos.
En su respuesta, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, afirmó que “no hay nada más sucio” que haber votado en contra de la nueva Comisión Europea, como ha hecho el PP en el Parlamento Europeo, para defender sus intereses partidistas por encima de los de Europa. “Lo nunca visto”, proclamó.
Según el ministro, con esta actitud, el PP ha “dado la espalda a Europa” en un momento convulso, con la guerra en Ucrania y el avance de la ultraderecha. Asimismo, aseguró que “el nombramiento de Teresa Ribera como vicepresidenta ejecutiva primera de la Comisión Europea, que se une a muchos otros, incluyendo a Nadia Calviño como presidenta del BEI, demuestra el peso creciente y la fiabilidad que ofrece España y sus políticas actuales en la UE y en el mundo”.