Juan David Latorre
El pasado lunes, en el marco de la celebración de la XXIII edición de la Semana de la Lengua Italiana en el Mundo (SLIM), la Embajada de Italia y la Academia Italiana de la Cocina organizaron un recorrido por la colección pictórica permanente de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, para descubrir a los pintores italianos, españoles e internacionales que han hecho de la comida «una forma de arte».
Los cuadros de Tintoretto, Corrado Giaquinto, Francisco de Goya, Giuseppe Arcimbolo, Jacob Jordaens, Juan de Zurbarán, Fernando Álvarez de Sotomayor, Joaquín Sorolla, Juan Van der Hamen, Peter Claesz y Peter Boel fueron los protagonistas del recorrido que estuvo perfectamente explicado y detallado por el personal de la real Academia y que interesó sobremanera a los asistentes.
En su discurso de bienvenida, el embajador italiano, Giuseppe Buccino Grimaldi, se refirió al evento como «un recorrido en el que el arte y la gastronomía se encuentran de manera excepcional, con el objetivo de destacar el valor cultural y social de la comida. En estas pinturas, el acto de comer se transforma en una metáfora de valores, identidad y tradición, para reflexionar sobre la importancia de la comida como auténtica forma de arte».
«Por ejemplo, continuó el embajador italiano: en la Última Cena de Tintoretto, la comida simboliza la unión y la comunidad. Arcimboldo nos presenta la Primavera como una mezcla de alimentos y naturaleza, fusionando creatividad y tradición. De igual manera, Goya, con El entierro de la sardina, nos ofrece una visión de la relación entre el pueblo y sus costumbres a través de la comida.»
Finalizó su intervención el embajador Grimaldi indicando que «la dieta mediterránea, presente en muchas de estas obras, no es solo un modelo alimentario, sino una expresión de saberes locales que se transmiten de generación en generación, uniendo Italia y España. Sin duda, la tradición culinaria mediterránea representa una herramienta de conexión fuerte y consolidada entre nuestros países».
Este recorrido especial por la colección permanente de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando se podrá visitar hasta el 1 de diciembre.