<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, reclamó ayer un nuevo Consejo de Seguridad de la ONU “coherente, reformado y responsable” y en el que deje de existir el derecho de veto de los cinco miembros permanentes (EEUU, Rusia, China, Francia y Reino Unido), cuyo uso, advirtió, genera “una constante de bloqueo”. Asimismo, ante la Asamblea General anunció que España incrementará la financiación humanitaria y para el desminado en Ucrania hasta los 14 millones de euros y que el objetivo de su Gobierno es aumentar la contribución a la ONU un 25%.</strong></h4> Sánchez hizo estas propuestas durante el debate 'Liderazgo para la paz' del Consejo de Seguridad, celebrado en la sede de Naciones Unidas y previo a su intervención en la Asamblea General de la ONU. Según el jefe del Ejecutivo, “los conflictos de hoy ponen a prueba la coherencia de los miembros del Consejo”. “Las resoluciones de este órgano no se aplican, el uso del veto resulta una constante de bloqueo y uno de sus miembros permanentes viola de manera flagrante la Carta de las Naciones Unidas invadiendo injustificada e ilegalmente otro país”, advirtió. Pedro Sánchez aseguró también que “la aplicación del Derecho Internacional no puede ser selectiva ni estar condicionada por intereses políticos o estratégicos” y, por ello, se deben “condenar, igualmente, las violaciones del Derecho Internacional, ya sucedan en Ucrania, en Gaza o en Sudán”. Aparte, el presidente del Gobierno advirtió de la necesidad de “transformar el sistema” de Naciones Unidas, “conservando lo que funciona, que es mucho, y reformando lo que ha quedado obsoleto”. “El Consejo de Seguridad necesita cambiar para adaptarse a la actualidad y ganar en operatividad”, afirmó. “España, como parte del grupo Unidos por el Consenso, defiende que el Consejo de Seguridad sea ampliado con miembros no permanentes y, lógicamente, abolir el veto”, anunció. “Mientras ese veto se mantenga, apoyaremos todas las iniciativas conducentes a la limitación de su uso”, aseguró. “Acabamos de aprobar un pacto muy importante, esperanzador, que es el Pacto del Futuro, con un compromiso de reforzar entre todos el multilateralismo para las generaciones venideras”, recordó el jefe del Ejecutivo. “Honremos ese compromiso con un Consejo de Seguridad coherente, reformado y responsable”, concluyó. <h5><strong>Asamblea General</strong></h5> Tras este acto, Pedro Sánchez intervino ante la Asamblea General de Naciones Unidas, en la que aseguró que “España es un país comprometido con los valores de la ONU, con un orden internacional basado en las normas y principios consagrados en la Carta de Naciones Unidas”, que “cree en los mecanismos internacionales de rendición de cuentas, defendiendo instituciones como la Corte Internacional de Justicia y la Corte Penal Internacional, esenciales para la paz, la justicia y la reparación de las víctimas”, y que “se conduce desde una máxima fundamental: el valor de la coherencia. Decimos lo mismo en Ucrania, en Gaza y en cualquier lugar del mundo”. “Trabajar activamente por la paz es hoy mucho más que una exigencia moral, es una necesidad existencial”, alertó. “Por primera vez crece el número de conflictos en el mundo, crece el número de países involucrados en guerras fuera de sus fronteras, a niveles sin precedentes desde 1945, aumenta el número de heridos, de mutilados, de personas desplazadas”, manifestó. “Frente a los apóstoles del desastre, los datos dicen que sabemos cómo hacerlo”, aseguró Sánchez. “La mortalidad infantil ha bajado del 50 al cuatro por ciento en medio siglo, el número de estudiantes universitarios se ha duplicado en dos décadas, las mujeres en parlamentos son el doble que en 1990 y la potencia solar instalada se ha duplicado en cuatro años”, prosiguió. “No aceptemos como inevitable el inicio de una nueva era de violencia y guerras. Apostemos por un multilateralismo renovado, con creatividad, audacia y ambición, que nos permita dejar un futuro mejor a nuestros hijos”, añadió. Durante su intervención, el presidente del Gobierno destacó la necesidad de impulsar la agenda del desarrollo sostenible, y anunció que el objetivo de España es incrementar su contribución al sistema de Naciones Unidas en al menos un 25% para 2025-2027. Asimismo, y en relación con el conflicto en Ucrania, Pedro Sánchez anunció que España aumentará la financiación humanitaria y para el desminado hasta los 14 millones de euros, y que la AECID incorporará en 2025 una línea de trabajo específica sobre su recuperación y reconstrucción. Pedro Sánchez dedicó buena parte de su discurso a Oriente Medio, donde, “desde hace casi un año. asistimos a un espiral de violencia y devastación que ya se extiende, lamentablemente, al Líbano”. “Quiero hacer un nuevo llamamiento a la desescalada, a la distensión y a la vía diplomática”, proclamó. “El Derecho internacional debe ser respetado, no solo poniendo fin a la guerra en Gaza”, sino “abordando las causas del conflicto israelí-palestino”, para que se pueda “resolver con éxito el resto de focos de inestabilidad en esa región”, agregó. <h5><strong>La jornada de Albares</strong></h5> Entretanto, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, mantuvo varios encuentros bilaterales y concluyó la jornada con su participación en la reunión del Grupo de Política Exterior Feminista, en el que aseguró que “España escucha las voces de las mujeres afganas y atiende a sus llamamientos”, y en la reunión ministerial del Grupo de Amigos de las Víctimas del Terrorismo, en la que trasladó su “más firme condena de todo tipo de terrorismo”, y el compromiso de España “con las víctimas”. En el plano bilateral, el ministro se encontró con su homólogo de Omán, Badr Albusaidi, con quien abordó “la preocupante situación en Oriente Medio” y elogió el papel mediador de su país, según informó a través de la red X. Posteriormente, se reunió con el comisionado general de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Medio (UNRWA), Philippe Lazzarini, a quien retteró el compromiso de España con su labor, “vital para seis millones de refugiados palestinos en estos difíciles momentos en Oriente Medio”. El siguiente encuentro fue con la ministra de Asuntos Exteriores de Corea del Sur, Kang Kyung-hwa, con la que acordó “profundizar el diálogo político, impulsar las relaciones culturales con apertura de un Instituto Cervantes el próximo año, y reforzar las económicas”. Albares se entrevistó también con el fiscal general de la Corte Penal Internacional, Karim Khan, a quien trasladó el apoyo de España a su trabajo “contra la impunidad” y en favor de “la rendición de cuentas y la reparación de las víctimas” y recordó que, el año pasado, el Gobierno destinó “seis millones de euros” a esta institución.
