<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha pedido al Partido Popular que se “disculpe” por las “calumnias e injurias” lanzadas al embajador de España en Caracas, Ramón Santos, y al “servicio exterior español” en su conjunto, después de que el candidato opositor venezolano, Edmundo González Urritia, asegurara en la noche del jueves en un comunicado que no había sido “coaccionado ni por el Gobierno de España ni por el embajador español en Venezuela”.</strong></h4> Edmundo González emitió el comunicado después de que el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, reclamase este jueves el cese del embajador en Venezuela y la dimisión de José Manuel Albares, y pidiese la comparecencia urgente del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para explicar las presiones y coacciones que, según él, sufrió el candidato opositor venezolano en la Embajada española por parte de dirigentes del régimen de Nicolás Maduro. A su juicio, no existen excusas ni motivos por los que se pueda tolerar que “en una Embajada española se coaccione a nadie”, y menos “a un representante del pueblo venezolano”. Concretamente, González Urrutia, exiliado desde el 8 de septiembre en España para solicitar asilo político, aseguró este miércoles (a través de un vídeo difundido por sus redes sociales) que, durante su estancia en la residencia del embajador español en Caracas, representantes del Gobierno de Nicolás Maduro le hicieron firmar, como condición para recibir el salvoconducto de salida del país, un documento en el que acataba la decisión del Tribunal Supremo de Justicia de su país de validar el triunfo de Maduro en los comicios del 28 de julio. En respuesta a esta información, el vicesecretario general de PP para asuntos exteriores, Esteban González Pons, acusó el jueves al Ejecutivo de Sánchez de ser un “cooperador necesario” de Maduro al permitir que el régimen bolivariano “coaccionara” a Edmundo González en la Embajada española en Caracas y denunció que “el Gobierno de España está implicado en el golpe de Estado que se ha producido en Venezuela”. En medio del revuelo, <strong>González Urrutia difundió un comunicado en la noche del jueves en el que aseguró que no había sido “coaccionado ni por el Gobierno de España ni por el embajador español en Venezuela, Ramón Santos”.</strong> “Las gestiones diplomáticas realizadas tuvieron como único propósito facilitar mi salida del país, sin ejercer ningún tipo de presión sobre mí”, prosiguió. Por otra parte, el Gobierno de Maduro ha difundido una imagen en la que se ve al opositor firmando una carta en presencia del embajador español, de la ‘número dos’ de Maduro, su vicepresidenta Delcy Rodríguez, y del presidente de la Asamblea Nacional y hermano de Dercy Rodríguez, Jorge Rodríguez. Fuentes del Ministerio no han aclarado todavía si las autoridades españolas fueron conscientes de la coacción a que fue sometido González Urrutia ni los motivos de la presencia del embajador en la citada foto. <strong>Albares</strong> “Me entristece que el PP haya forzado a Edmundo González, un hombre de 75 años, a emitir a última hora un comunicado que deja clara la honorabilidad del servicio exterior español”, declaró este viernes Albares durante un encuentro con periodistas en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores. Según el ministro, los líderes del PP “injuriaron y calumniaron al servicio exterior de España, a miles de mujeres y hombres que todos los días hacen su labor, sin injerencias en los asuntos internos, en favor de los intereses de España, en la protección de los españoles y en labores humanitarias”. “Ya han pasado doce horas desde que Edmundo González emitió su comunicado y el PP todavía no ha pedido disculpas”, advirtió. “La embajada y el embajador, en todo momento, han ofrecido la protección solicitada por Edmundo González, nadie habría entendido que se le hubiera rechazado, no lo hubiera entendido ningún español y ningún venezolano”, prosiguió. “La Embajada en Caracas, lo único que hizo fue ofrecer protección a Edmundo Gonzáles y garantizarle un espacio, un lugar tranquilo, con libertad para verse con quien quiera verse y hablar con quien quiera hablar”, aseguró. “Si hubiéramos seguido lo que sugería el PP, Edmundo González, en vez de libre, estaría detenido en Caracas”, aseveró. “Todo lo que sucedió en torno a la llegada de Edmundo González a España fue a petición de Edmundo González”, aseguró el ministro. “La entrada en la residencia, la venida a España, la solicitud del derecho de asilo y cualesquiera conversaciones que haya podido tener, y por tanto no me voy a pronunciar sobre ello", prosiguió Albares, quien se remitió, por ello, al propio candidato opositor, el único "habilitado" para hablar sobre todo ello. Respecto a si Ramón Santos estaba informado del contenido del documento firmado por González o a si estuvo presente en el momento de la firma, Albares aseguró que el embajador “no se inmiscuyó en nada” porque las Embajadas no se meten “en política interna de los países”. "Tenía instrucciones claras y precisas de garantizar esa protección, esa tranquilidad de Edmundo González, esa libertad para reunirse y hablar o no hablar”, manifestó. Por otra parte, fuentes de Exteriores recordaron que “el ministro Albares solicitó al Congreso comparecer a petición propia para explicar el traslado a España de Edmundo González el primer día hábil tras la llegada a nuestro país del dirigente venezolano”. “En estos momentos el ministro está a la espera de que el Congreso le confirme una fecha”, añadieron.