The Diplomat Los ministros de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, y de Cultura, Ernest Urtasun lanzaron ayer un mensaje de apoyo a la pluralidad cultural y a la transformación digital, durante su intervención en la clausura de la Reunión de Directores del Instituto Cervantes, celebrada a lo largo de esta semana en el Ayuntamiento de Barcelona. Urtasun recordó a los recientemente fallecidos Francisco Rico, profesor “a quien le debemos-dijo- el acercamiento al Quijote a través de su mirada sabia" y la escritora Rosa Regàs, para quien señaló que la cultura era “una forma de comprender el compromiso con la vida". Para el titular de Cultura, el Instituto Cervantes es el lugar "en el que esa comprensión se hace más evidente", ya que es "una institución pública que es referencia de nuestro patrimonio lingüístico y de la difusión en el exterior de la cultura de nuestro país". Por su parte, José Manuel Albares, que no pudo estar de manera presencial en la clausura, agradeció en un vídeo la labor del Cervantes, que definió como "la mejor herramienta para promover universalmente el uso del español", ya que la tarea del instituto es "de enorme importancia y contribuye de forma decisiva a reforzar nuestro papel en el mundo". Además de destacar las buenas cifras del Cervantes en materia de certificación y número de alumnos/hora, el ministro de Asuntos Exteriores alabó la labor de promoción de las lenguas cooficiales, "porque forman parte -manifestó- de la riqueza cultural de España". Albares anunció que se hará realidad la ampliación de la red Cervantes con la próxima inauguración oficial de un centro en la capital de Corea del Sur, Seúl, actualmente Aula Cervantes. El concejal de Cultura del Ayuntamiento barcelonés, Xavier Marcé, celebró la presencia del Instituto Cervantes en Barcelona y le pidió "una propuesta más rotunda” en torno a la diversidad cultural, resaltando el compromiso de la capital catalana con la realidad plurilingüe. Luis García Montero, director del Instituto Cervantes, indicó que la presencia en Barcelona de los directores de los centros era para destacar la diversidad cultural y lingüística del Estado, y para afirmar a Barcelona como "gran capital de la cultura catalana y una de las grandes de la cultura en español". Ante la petición de Marcé, García Montero subrayó su compromiso de "fortalecer el compromiso con la diversidad lingüística y el catalán", y afirmó que desde el Cervantes se defiende “la diversidad como riqueza democrática". El director de la institución ensalzó el valor de la cultura, "un bien fundamental -dijo- que nos hace tomar consciencia de todo lo que cabe en las palabras, ahí reside la historia de cada comunidad y la experiencia de cada persona a la hora de establecer vínculos con las lenguas maternas y la ilusión de crear un bien común”. Asimismo, Carmen Noguero, secretaria general del Instituto, destacó la tensión permanente que el Cervantes vive entre la globalización y las particularidades de cada centro, por lo que "trabajamos sobre el terreno y eso es lo que nos caracteriza", afirmó. La profunda transformación digital que está viviendo la institución ha sido la gran protagonista de muchas de las sesiones de trabajo, un cambio que "no es una capa tecnológica, sino una transformación de cómo trabajamos", concluyó Noguera. Para terminar, García Montero incidió en la importancia de contar en la reunión con la referencia hermana de instituciones con "una estrechísima relación" en México, Colombia y Perú —que acogerá en la ciudad de Arequipa en 2025 el Congreso Internacional de la Lengua Española— y conocer cómo abordan el multilingüismo y la interculturalidad. Como último acto oficial fue presentado el Institut Ramon Llull, con las intervenciones de su director, Pere Almeda, y de los responsables del Área de Lengua y Universidades, Josep-Anton Fernàndez, del Área de Creación, Maria Lladó, y del Área de Literatura y Pensamiento, Joan de Sola. El Institut Ramon Llull colabora con el Cervantes desde 2004, año en el que firmaron su primer acuerdo de colaboración para apoyar, junto con las instituciones que promocionan las lenguas y culturas vascas y gallegas —el Etxepare y el Consello da Cultura Galega, respectivamente, la diversidad lingüística de España y el respeto a su realidad pluricultural a través del diálogo y el entendimiento.