Luis Ayllón
Una quincena de embajadores españoles jubilados ha hecho pública una declaración en la que muestran su rechazo hacia la política que viene manteniendo el Gobierno de Pedro Sánchez con respecto a Argentina e Israel, dos países a los que califica de “amigos” y con los que se han abierto recientemente sendas crisis diplomáticas.
La declaración ha sido suscrita por diplomáticos que han sido embajadores o han ocupado altos cargos, en su mayoría, con anteriores Gobiernos del PP o del PSOE o con ambos. En ella señalan que la política exterior es, por antonomasia, una política de Estado que “debe ser llevada a cabo -dicen- con el mayor consenso posible” entre el Ejecutivo y los partidos de la oposición. Y advierten de que esa política “ha de buscar el interés general de España y no el particular de un partido o de una persona”.
Firman el escrito, que lleva por título “Declaración sobre algunos aspectos de la política exterior española” los embajadores: Inocencio Arias, José Ignacio Benavides, Manuel de la Cámara; Ignacio Camuñas; José Manuel Cervera, Javier Jiménez Ugarte; Juan Leña, Erik Martel, Ramón de Miguel, Arturo Pérez, Luis Guillermo Perinat; Juan Prat, José Ramon Remacha, Eloy Ibáñez y José Antonio Yturriaga.
La declaración incluye los siguientes trece puntos:
1.-La política exterior es, por antonomasia, una política de Estado, que debe ser llevada a cabo -al menos en sus aspectos fundamentales- con el mayor consenso posible entre el Gobierno y los partidos de la oposición. Dicha política ha de buscar el interés general de España y no el particular de un partido o de una persona.
2.- Aunque el presidente de la República Argentina, Javier Milei, había sido repetidamente agraviado por el Gobierno español, rechazamos su comentario insultante sobre la esposa del presidente del Gobierno, realizado durante su estancia en España.
3.-Consideramos desproporcionada la reacción del Gobierno, cuyo ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, anunció la retirada “sine die” de la embajadora de España en Buenos Aires. Estimamos, sin embargo, que los insultos a una persona particular no suponen una afrenta a la seguridad y a la dignidad nacional, ni un ataque frontal a la democracia y a las instituciones de España.
4.-España mantiene relaciones fraternales con Argentina, un país en el que vive casi medio millón de españoles y en el que operan importantes empresas españolas, al par que en España hay también muchos ciudadanos y empresas argentinos, que trabajan por la concordia, la cooperación y el bienestar de ambos pueblos. El Gobierno español los ha puesto en peligro por la injustificada retirada permanente de su Embajadora, lo que. constituye un hecho sin precedentes en la Historia de los dos Estados.
5.-Los judíos han formado una parte importante en la Historia de España y -pese a su expulsión del país a finales del siglo XV- los sefarditas han mantenido a lo largo de los siglos la lengua, la cultura y las tradiciones españolas, con la ayuda del Consulado General de España en Jerusalén desde 1856. El pueblo judío ha sido víctima de genocidio por parte del régimen nazi alemán durante el siglo XX, mediante un holocausto que provocó el exterminio de millones de personas.
6.-Tras la creación en 1947 del Estado de Israel y los subsiguientes enfrentamientos bélicos entre israelíes y árabes, las tropas israelíes ocuparon Gaza y la mayor parte de Cisjordania, y su Gobierno no ha permitido que el pueblo palestino haya ejercido su legítimo derecho a la libre determinación.
7.-Desde que establecieron relaciones diplomáticas en 1986, España e Israel han llevado a cabo una amistosa política de cooperación, que se ha puesto últimamente en entredicho por la conducta inadecuada de los dos Gobiernos.
8.-El 7 de octubre de 2023, el movimiento terrorista Hamas -que gobierna en Gaza- realizó un brutal ataque dentro de Israel en el que sus miembros asesinaron a unos 1.200 israelitas y secuestraron a un centenar de ciudadanos, lo que supuso un cualificado acto de genocidio. En el ejercicio de su derecho de legítima defensa, Israel atacó a Gaza, pero lo está haciendo de forma desproporcionada y en violación de las normas del Derecho Internacional y del Derecho Humanitario, causando más de 30.000 muertos.
9.-Aunque esta actuación sea condenable, no justifica que la vicepresidenta del Gobierno Teresa Ribera, y la ministra de Defensa Margarita Robles hayan acusado a Israel de cometer actos de genocidio, y que la vicepresidenta Yolanda Díaz y varios ministros hayan asumido los postulados de Hamas y propugnado el reconocimiento de un Estado palestino desde el río Jordán al Mar Mediterráneo, lo que implicaría la destrucción de Israel.
10.-El Gobierno israelí ha reaccionado de forma desproporcionada al reconocimiento por el Gobierno español del Estado palestino, y el ministro de Asuntos Exteriores, Israel Katz, lo ha acusado de alentar el genocidio del pueblo judío, y tomado medidas de retorsión, como la amenaza de cerrar el Consulado General de España en Jerusalén.
11.-Hamas e Israel han actuado de manera execrable, igual que ha hecho Irán, que ha atacado a Israel a través de sus protegidos Hamas, Hizbollah y las milicias hutíes.
12.-Es imperativo y urgente la adopción de un alto el fuego en Gaza, tal y como ha propuesto la Asamblea General de la ONU, pero que no ha podido ser acordado en el Consejo de Seguridad por el veto de Estados Unidos. El primer ministro israelita, Benjamín Netanyahu -que ha sido denunciado por el fiscal general de la Corte Penal Internacional por crímenes de guerra y de lesa humanidad- ha hecho caso omiso a la orden del Tribunal Internacional de Justicia de que cesen de inmediato los ataques en Rafah y la situación en esta ciudad es cada día más calamitosa.
13.-El Gobierno español no ha estado a la altura de sus responsabilidades, ni en el grave conflicto armado de Gaza entre Israel y Hamas, ni en el inexistente conflicto entre España y Argentina.
Los embajadores concluyen afirmando: “En nuestra calidad de personas que hemos dado buena parte de nuestra vida al servicio del Estado, hacemos un llamamiento al Gobierno para que adopte una actitud conforme con su responsabilidad histórica y con el interés general de España”.