<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>España se ha sumado a la iniciativa checa, apoyada por otra decena de países, para que la Presidencia belga del Consejo de la UE acelere el proceso de adhesión de Ucrania y Moldavia antes del inicio de la próxima Presidencia húngara. </strong></h4> “España se ha sumado a la carta iniciada por la República Checa apoyando la adopción de los marcos de negociación que permitan convocar este mes de junio las conferencias intergubernamentales que darán inicio a las negociaciones de adhesión UE de Ucrania y Moldavia”, declaró ayer el Ministerio de Asuntos Exteriores a través de la red social X. Trece países de la UE han enviado una carta, por iniciativa de la República Checa, en la que se pide que la Presidencia belga adopte, este mismo mes de junio, los marcos de negociación para la adhesión de Ucrania y Moldavia y convoque las conferencias intergubernamentales con los dos países. La adopción de ambas medidas, según la carta, implicaría la apertura, de hecho, de las negociaciones de adhesión con Ucrania y Moldavia y “levantaría la moral e impulsaría la labor de reformas en estos países”. La carta ha sido enviada a la ministra belga de Asuntos Exteriores, Hadja Lahbib. De momento se han adherido a esta iniciativa Alemania, Estonia, Eslovenia, Eslovaquia, Portugal, Suecia, Finlandia, Letonia, Polonia, Irlanda y Rumanía, además de España. Francia aún no lo ha hecho, pero ha asegurado que hará “todo lo posible” para ayudar a que la primera reunión se lleve a cabo antes de que concluya junio. Según informaron fuentes comunitarias al 'Financial Times’, la Comisión Europea va a “recomendar” que se aceleren las negociaciones para la adhesión de Ucrania y Moldavia, por considerar que Ucrania ya ha completado todos los requisitos previos, como la lucha contra la corrupción o la mejora de la normativa relacionada con los impuestos, entre otros. El objetivo de los países firmantes es que se abran las negociaciones antes de que Hungría asuma la Presidencia del Consejo de la UE, que comienza el 1 de julio. Por ello, según las citadas fuentes, la Presidencia belga podría proponer que la primera ronda de negociaciones comience el día 25 de junio. Cualquier paso para la adhesión de Ucrania y Moldavia requiere del beneplácito de los 27 Estados miembros, lo cual podría chocar con las reticencias del Gobierno húngaro de Viktor Orbán, que no parece nada partidario de acelerar el proceso de adhesión de Ucrania con el argumento de que este país no se encuentra en condiciones de entrar en la UE por motivos legales y económicos. Hungría ha mostrado una actitud bastante díscola respecto a la guerra de Ucrania casi desde el principio, contribuyendo en ocasiones a retrasar la adopción de sanciones contra Rusia, aunque sin llegar a vetarlas. En el último Consejo Europeo de la Presidencia española del Consejo de la UE, celebrado el pasado mes diciembre en Bruselas, Orbán y el resto de líderes europeos llegaron a un acuerdo para que el primer ministro magiar se ausentara de la sala en el momento mismo en que se votaba el acuerdo para el inicio de las negociaciones de adhesión de Ucrania y de Moldavia, a fin de evitar el veto de Hungría.