Alberto Rubio
La celebración de Mayáles, la fiesta de mayo, el pasado viernes en la residencia del embajador Libor Secka, fue el colofón a 11 días de intensa actividad en torno a las Jornadas Checo-Españolas que comenzaron el pasado 20 de mayo y en las que ambos países exploraron el estado actual de sus relaciones bilaterales y su proyección hacia el futuro.
“Me he dado cuenta de que nos faltaba la fiesta”, bromeó el embajador al dar la bienvenida a los invitados a la fiesta, en la que actuó el grupo de folk-rock Cechomor. Libor Secka aludió a los números actos organizados en estas dos semanas que duraron las jornadas, cuyo objetivo fue “promover la relación bilateral, dar a conocer todas las posibilidades que tiene y que podamos aprovecharlas mejor”.
Las jornadas se inauguraron el pasado 20 de mayo, con la conferencia ‘Unidos en Europa: diversos caminos, una meta común’, a la que asistió el ministro para Asuntos Europeos de Chequia, Martin Dvorak, acompañado por el ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares.
A lo largo de la semana se desarrollaron conferencias y foros relacionados con los sectores de defensa y la OTAN —‘Dos países una misión común’—; sanidad —‘Día dedicado al corazón’—; economía —‘Transición verde en energía y transporte’—; y una presentación para medios de comunicación y turoperadores de las nuevas propuestas turísticas de Chequia.
También se celebraron varios eventos dedicados a la cultura como la exposición del cómic ‘Aquí y ahora’; la exposición de diseño de cristal contemporáneo ‘Simply the Best’ y el concierto del quinteto romaní checo ‘Ivan Herák’ en el Día de los Gitanos Madrileños.
Todavía queda un último evento dentro del programa de actos previsto para estas Jornadas Checo-Españolas. Será la Noche de Kafka, que tendrá lugar el próximo 6 de junio en la Nave de terneras de la Casa del Reloj, en Madrid.