The Diplomat
El Gobierno español condenó ayer “enérgicamente” la decisión del Gobierno de Benjamin Netanyahu de aprobar la expansión de asentamientos judíos en el territorio palestino de Cisjordania y reclamó a Israel “que revierta la medida”.
“Los asentamientos son contrarios al Derecho Internacional, socavan los esfuerzos para hacer realidad la solución de los dos Estados y son un obstáculo para la paz”, añadió el Ejecutivo. El comunicado se produce en un momento delicado en las relaciones bilaterales entre España e Israel a causa del rechazo del Gobierno de Pedro Sánchez a la ofensiva israelí en la Franja de Gaza.
Aparte, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, anunció el pasado lunes ante la Comisión Mixta para la Unión Europea del Congreso de los Diputados que el Gobierno español ha “iniciado los trámites para imponer sanciones a un primer grupo de doce colonos violentos de Cisjordania”, al igual que han hecho países como Estados Unidos o Reino Unido y a la vista de la incapacidad de la UE para alcanzar un acuerdo en este sentido a causa del bloqueo de Hungría.