<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, se reunió ayer en París con los importadores de productos alimentarios y hortofrutícolas españoles, a quienes informó de que tanto él como la Embajada de España en Francia y la red consular española han trasladado a las autoridades francesas el malestar por los incidentes sufridos por los transportistas y la defensa de los productos españoles.</strong></h4> <strong>“Me encuentro en la Embajada de España en París, donde he recibido a los importadores de productos alimentarios y hortofrutícolas españoles del mercado parisino de Rungis, el principal mercado de abastos de toda Europa, con un volumen de productos españoles similar al de Mercamadrid o al de Mercabarna”,</strong> declaró el ministro a la prensa al término de la reunión. <strong>“Hemos estado de acuerdo en unir fuerzas para defender la calidad de nuestras frutas, nuestras hortalizas y nuestros productos alimentarios y también para defender a nuestros transportistas y garantizar la libre circulación de mercancías y el mercado único europeo”</strong>, añadió. Durante el encuentro, Albares trasladó su apoyo a los transportistas y agricultores españoles y calificó de <strong>“inaceptables” los incidentes sufridos por los transportistas de productos españoles en el marco de las protestas agrícolas francesas</strong>, así como <strong>las declaraciones en contra de los productos españoles</strong>, “de alta calidad y que cumplen plenamente la normativa europea aplicable”. Asimismo, <strong>recordó que Francia y España son “dos socios clave” en el sector agropecuario</strong>, que tiene un importante componente social y de vertebración territorial. Como Estados miembros de la UE, añadió, “defendemos un mercado común construido sobre la base de la Política Agrícola Común y la libre circulación de mercancías, entre otras políticas”. El ministro Albares <strong>quiso agradecer, expresamente, las palabras y la solidaridad del ministro francés de Agricultura, Marc Fesneau</strong>, que, a su juicio, son una prueba de que España y Francia son dos socios clave en el sector agroalimentario. José Manuel Albares advirtió también de <strong>la importancia de mantener el mercado común europeo</strong>, ante el auge de movimientos euroescépticos, un mercado común que, destacó, es “particularmente importante en este sector, garantía de nuestra seguridad alimentaria, de nuestra cohesión territorial y de la preservación del tejido social”. <strong>En el encuentro estuvieron presentes</strong> Nicolas Morinière, vicepresidente de la Compagnie Fruitière, gran grupo importador y distribuidor de frutas en Europa y particularmente en España; Philippe Lliso, presidente de Rafael López, operador histórico del Mercado Internacional de Rungis, con numerosos vínculos con España; Jesus Bordils, presidente de Bordils, operador histórico del Mercado Internacional de Rungis y también con importantes vínculos con España; Julien Fenes, presidente de Primeurs Saint Denis, operador histórico del Mercado Internacional de Rungis, con numerosos vínculos con España; Olivier Herrera, presidente fundador de Fresal, operador en el Mercado de Rungis, especializado en la importación de frutas y legumbres provenientes de España y especializado en frutos rojos.; Veronika Soboleva, esposa de Olivier Herrera y presidenta ejecutiva de Fresal; y Franck Lliso, director general de Select Agrumes, operador histórico del Mercado Internacional de Rungis y, al igual que algunos de los asistentes, con numerosos vínculos con España.