The Diplomat
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, advirtió ayer en el Foro Económico Mundial de Davos de que si Rusia ganase la guerra en Ucrania, “todo el mundo estará menos seguro porque su vecino grande podría querer hacer lo mismo”.
“No importa el continente en el que uno esté, le afecta. Si Rusia gana esta guerra, todo el mundo estará menos seguro porque su vecino grande podría querer hacer lo mismo”, declaró el ministro durante la mesa redonda Ukraine’s Horizons, en la que también participó Andriy Yermak, el jefe de gabinete del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski.
Aparte, prosiguió, la guerra está teniendo “efectos colaterales” y, por tanto, un “impacto en países que están muy lejos de Ucrania”, como ha sucedido con el suministro de cereales. Por ello, advirtió, “lo que está en juego en Ucrania no es solo la soberanía y la independencia” del país, sino “mucho más”. “Pensábamos que para todos estaba muy claro que esta era una guerra en Europa, pero no era una guerra europea, sino que afecta a todo el mundo porque afecta a los principios de la Carta de Naciones Unidas”, añadió.
Albares defendió también el proceso de adhesión de Ucrania a la UE, que debe ir paralelo al proceso de reconstrucción del país. Es un “desafío enorme” porque “Ucrania es un país en guerra” y, si no se planifica adecuadamente la reconstrucción, “nunca será capaz de cumplir los criterios” para su entrada en la Unión, advirtió.