<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <strong>Los equipos negociadores de España y Reino Unido se reunieron ayer en Málaga para retomar las conversaciones sobre la futura relación entre Gibraltar y la Unión Europea tras el Brexit, después de varios meses de interrupción a causa de las elecciones españolas y gibraltareñas.</strong> <strong>Según informó el Gobierno de Gibraltar, el encuentro contó con la presencia del ministro principal del Peñón, Fabian Picardo; el viceministro principal, Joseph García, y el fiscal general, Michael Llamas</strong>. “La formación de Gobiernos de continuidad de los mismos colores políticos en Gibraltar y en España, tras las elecciones generales celebradas en ambos lugares, ha facilitado la continuación de las conversaciones desde donde las dejaron”, destacó el Ejecutivo gibraltareño en una nota de prensa. “Se espera que este contacto renovado continúe entre las diferentes partes y a diferentes niveles en los próximos días y semanas”, añadió. <strong>Las negociaciones llevan varios meses paralizadas a causa del adelanto de las elecciones generales en España y de los comicios celebrados en el Peñón el pasado mes de octubre.</strong> Aparte, las conversaciones han experimentado pocos avances a causa de las reservas de Londres en asuntos como la presencia de miembros de las Fuerzas de Seguridad españolas en los controles de pasajeros del puerto y del aeropuerto o por su negativa a cualquier control de España sobre los movimientos del personal de la base de la Royal Navy en el Peñón, que las autoridades españolas consideran esenciales para poder ejercer sus atribuciones como frontera del espacio Schengen. Además, sigue sin haber acuerdos en asuntos como la armonización fiscal o el medio ambiente, entre otros. <strong>El pasado 28 de noviembre, los ministros de Asuntos Exteriores de España y Reino Unido, José Manuel Albares y David Cameron, acordaron la reanudación de las negociaciones</strong> sobre la futura relación entre Gibraltar y la Unión Europea. Aunque quienes negocian formalmente son la Comisión Europea y el Reino Unido, España sigue los contactos en primera línea y cualquier acuerdo que Bruselas y Londres puedan alcanzar no se podrá suscribir si no cuenta con el visto bueno de las autoridades españolas. Según Albares, durante la conversación se abordaron, sobre todo, “los únicos aspectos que nos separan de tener un acuerdo definitivo, por ejemplo, la fórmula del uso conjunto del aeropuerto, sobre lo que hemos estado intercambiando puntos de vista y opiniones, y otros aspectos que quedan por delimitar” y que “por discreción diplomática guardamos para la negociación”. A la pregunta de si entre estos asuntos pendientes figura el control de la frontera (Gibraltar no forma parte del espacio Schengen, lo que obligaría a efectuar controles fronterizos tanto en el aeropuerto como en el puerto del Peñón por parte de España o de la agencia europea de fronteras, Frontex, durante un periodo inicial de cuatro años), Albares se limitó a responder: “cuando esté todo acordado, les garantizo que yo seré el primero que vendré a verles a explicarles cada punto del acuerdo, ahora vamos a dejar trabajar a los equipos”. Según el ministro, “estamos tan cerca que ya lo que quedan son aspectos específicos, puntuales”. “La mayor parte del acuerdo está ya acordado, pero, y yo sé que parece un mantra, nada está acordado hasta que todo está acordado”, prosiguió. Asimismo, recordó que España “ha puesto encima de la mesa” un acuerdo global “equilibrado y generoso” que abarca “todos los aspectos que rigen la vida cotidiana de Gibraltar y del Campo de Gibraltar y para consolidar esa zona de prosperidad compartida”. “De lo que se trata ahora mismo es de encontrar fórmulas que sean eficaces para conseguir ese objetivo que todos queremos”, agregó. <strong>Respecto a si se han planteado posibles fechas para la firma del acuerdo, Albares precisó: “No soy capaz de dar un horizonte temporal en estos momentos</strong>”. Además, aunque España tenga la última palabra, recordó que el acuerdo tiene que cerrarse entre el Reino Unido y la Comisión Europea “y vamos a tener -recordó- elecciones para una nueva Comisión en junio” y, por lo tanto, habrá que tener en cuenta “el arranque de la campaña para las elecciones europeas”.
