<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El Alto Representante de Política Exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, expresó ayer su deseo de que España “pueda acoger” la conferencia internacional de paz para Oriente Próximo respaldada la semana pasada por el Consejo Europeo a propuesta del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez.</strong></h4> <strong>“El conflicto nos obliga a comprometernos políticamente en la solución de dos Estados, que la hagamos real”</strong>, porque, desde los Acuerdos de Oslo en los que se aprobó esta medida, <strong>la Unión Europea lleva treinta años “diciendo que esta es la solución, pero haciendo muy poco o nada”</strong> para conseguirla, declaró Borrell durante <strong>una conferencia en la sede de la Escuela Diplomática en Madrid. </strong> La paz “no vendrá sola, hay que construirla y la comunidad internacional no ha hecho todo lo que debería haber hecho para llevar a la práctica los acuerdos de Oslo”, prosiguió Borrell. “Si no paramos el ciclo de la violencia, se volverá a repetir en unos años”, alertó. Por ello, <strong>el alto representante se mostró a favor no solo de la celebración de la conferencia internacional de paz propuesta por el Gobierno español “tan pronto como sea posible”, sino incluso de que España “pueda acogerla, como acogió la de Madrid” en 1991</strong>, en la que se sentaron las bases teóricas para el inicio de un proceso de paz entre israelíes y palestinos. <strong>El pasado 26 de octubre, los líderes de los 27 acordaron “reactivar un proceso político basado en la solución de dos Estados” y mostraron “su apoyo a la pronta celebración de una conferencia internacional de paz”</strong>, sin más precisiones. La conferencia había sido propuesta por Pedro Sánchez para “dentro de seis meses” y con el objetivo de que “toda la comunidad internacional se sienta implicada” en favor de la solución de dos Estados. La propuesta española no incluía ninguna sede. <h5><strong>Apoyo a António Guterres</strong></h5> En su intervención, el alto representante reiteró que <strong>“Israel tiene derecho a defenderse”, pero ese derecho tiene “un límite” y “unas reglas” que “están acuñadas en el Derecho Internacional y lo hemos dicho referidos a otros conflictos”. </strong>“Cortar el agua a una población no es compatible con el derecho de la guerra”, advirtió. “Pedimos a Israel que respete el Derecho Internacional”, porque no se debe “responsabilizar a todos los gazacíes de las atrocidades que comete y ha cometido Hamás”, declaró Borrell. Asimismo, <strong>Borrell expresó su apoyo al secretario general de la ONU, António Guterres</strong>, ante la “fuerte reacción” que generaron en Israel sus palabras, en las que afirmó que los ataques de Hamás no “surgían de la nada”, sino que fueron el resultado de décadas de “asfixiante ocupación”. “Creo que tiene razón”, manifestó Borrell. Los atentados de Hamás de pasado 7 de octubre “no se produjeron por arte de magia”, sino que son “una respuesta a una situación”, prosiguió. <strong>“Explicar no es justificar”,</strong> advirtió el alto representante, quien recordó que la UE ha condenado los ataques del grupo terrorista islamista de forma “clara y contundente”. Por otra parte, Borrell advirtió de que <strong>no se deben aplicar “dobles raseros”, porque los territorios palestinos “son tan ocupados como lo son los territorios ucranianos invadidos por Rusia, conforme al Derecho Internacional”</strong>. Aparte, añadió, el territorio ocupado por Israel “se ha multiplicado por cuatro” mientras que el territorio palestino “se ha ido encogiendo y dividiendo en zonas inconexas”. “¿En qué lamentar una tragedia me quita fuerza moral para lamentar otra?”, se preguntó Borrell. “La fuerza moral para condenar algo la tengo si condeno otra cosa igual cuando ha sido hecha en otro lugar, por otra gente quizás más cercana a mí, y si no comprendemos esto no podemos ser útiles para intentar resolver el conflicto”, afirmó. Por ello, insistió, <strong>la UE “carecería de autoridad moral” si solo denunciase matanzas de civiles en Ucrania.</strong> <h5><strong>Albares</strong></h5> En el mismo acto, <strong>el ministro de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel Albares</strong>, aseguró que España responde tanto en Ucrania como en Gaza “de la misma manera”, con la defensa de la Carta de Naciones Unidas y de los tratados de la Unión Europea y con “valores que rechazan la guerra como forma de resolver conflictos”. Asimismo, advirtió de que, en estos momentos, es necesario centrarse en “lo urgente” y evitar que la crisis actual adquiera “una dimensión desproporcionada”, y reiteró que la “solución de dos Estados” sería “la mejor garantía de seguridad para Israel y de estabilidad, seguridad y paz en Oriente Medio”. El ministro volvió a afirmar que Israel “sufrió un ataque terrorista y tiene derecho a defenderse”, pero advirtió de que hay que distinguir “entre objetivos terroristas y civiles” y se debe facilitar el acceso a “suministros básicos” a la población de Gaza. “España alzó su voz la primera para decir que la ayuda a Palestina tiene que continuar, que tenemos que diferenciar Hamás del pueblo palestino”, insistió.