<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>La comunidad judía centenaria de Barcelona (CIB.CAT) y la Federación de Comunidades Judías de España (FCJE) han aplaudido la decisión del alcalde de Barcelona, el socialista Jaume Collboni, de reanudar su hermanamiento con Tel-Aviv, dejando sin efecto la ruptura de las relaciones, “decidida unilateralmente y en período electoral” por la anterior alcaldesa, Ada Colau.</strong></h4> <strong>Collboni firmó el pasado viernes el decreto que deja sin efecto la “suspensión temporal” de las relaciones entre la capital catalana y las relaciones con el Estado de Israel y con todas sus instituciones, incluido el hermanamiento con la ciudad de Tel Aviv”.</strong> El Ayuntamiento de Barcelona se hermanó con Tel-Aviv y Gaza en 1998, pocos años después de la firma de los Acuerdos de Oslo (1994), que debían llevar la paz a la región. El Ayuntamiento de Barcelona suspendió, el pasado 8 de febrero, las relaciones institucionales con el Estado de Israel y todas las instituciones oficiales del país, incluido el hermanamiento con la ciudad de Tel Aviv, después de que Ada Colau se reuniera con las entidades impulsoras de la iniciativa ciudadana <em>Barcelona con el Apartheid no, Barcelona con los derechos humanos sí</em>, de apoyo al pueblo palestino. En una nota de prensa posterior, la FCJE rechazó la decisión de la Comisión de gobierno del Ayuntamiento de Barcelona, adoptada “con el único apoyo de 4.000 firmas, por decreto y sin debate”, por considerar que “no representa ni en forma ni en fondo lo que es Barcelona ni sus ciudadanos” y que “no tiene que ver ni con la política ni con los derechos humanos ni con la paz”. “Esto tiene un nombre y se llama ‘Antisemitismo sofisticado’”, añadió. <strong>Apenas dos semanas después, el pleno del Ayuntamiento rechazó por amplia mayoría la decisión de Ada Colau </strong>y pidió que, “de manera urgente e inmediata, el gobierno municipal restablezca las relaciones con el Estado de Israel y el hermanamiento de Barcelona con las ciudades de Tel-Aviv y Gaza”. El texto fue aprobado con los votos favorables de Junts per Catalunya, PSC, Ciudadanos, PP, Valents y una concejala no adscrita, y con la abstención de ERC y el voto en contra de BComú, la formación de Colau. <strong>Por ese motivo, CIB.CAT y FCJE reclamaron este pasado lunes al Ayuntamiento de Barcelona, presidido desde el pasado mes de junio por Jaume Collboni tras las elecciones municipales del 28 de mayo, que deshaga “los pasos en la dirección errónea”</strong> y retorne al “camino que siempre ha definido Barcelona: una sociedad de progreso y vanguardia, diálogo y tolerancia, que no tolera ni promueve ninguna forma de antisemitismo ni de discriminación contra minorías”. <strong>“El hermanamiento entre Tel Aviv, Gaza y Barcelona es una herramienta para el diálogo y una puerta para empezar a hablar, y no a destruir”</strong>, y, por ello, “la CIB, como centenaria comunidad judía de Barcelona, lamenta que la anterior alcaldesa nunca se acercara a esta institución, aunque desde la ruptura del hermanamiento se le enviaron tres cartas que no respondió”, concluyó la nota de prensa.